Como si nada hubiera pasado ni estuviera transcurriendo un escándalo alrededor de su vida, Gustavo Conti muestra actividad normal en sus redes sociales. Alejado de los rumores de intensa crisis y posible separación de Ximena Capristo después de que la propia actriz revelara una supuesta infidelidad suya, el actor sube videos, se saca fotos, hace chistes y hasta mete chivos.
Desde que estalló la cuestión, el lunes, cuando la "detective" Juariu dio a conocer una serie de incendiarios chats suyos con otra mujer que la Negra había subido pero después borrado, Conti no respondió a ni uno de todos los periodistas que pretendieron conocer su palabra o escuchar su versión de lo que estaba sucediendo. Sin embargo, siguió muy activo en el mundo digital.
En ese espacio no paró de subir cosas. Por ejemplo, el último video de los dos juntos los muestra saboreando un jugoso asado. El le sirve una porción de costillar a ella, que primero se niega a "seguir comiendo" pero después no se puede resistir a esa carne recién salida de una parrilla que está coronada por el escudo de Boca, el club del que los dos son hinchas.
Como si no estuviera transcurriendo un escándalo alrededor de su vida, Conti mostró "actividad normal" en sus redes. En los videos que subió se lo puede ver haciendo chistes, en la cocina, jugando y hasta metiendo chivos.
También tuvo lugar para las bromas. En uno de los videos, se lo puede ver subir a una balanza electrónica, pero con los pies tapa el resultado que arroja el "maldito aparato" -mucho más en esta época de cuarentenas y encierros prolongados- y se escucha algo así como una carcajada. Una de las cosas que mas costó durante el aislamiento fue mantener el peso y las conductas alimenticias.
En otras imágenes se lo observó jugando con su hijo, Felix, también mostró un toc referido a su cocina (todos los artefactos tienen que estar perfectamente ordenados) y en todos los videos se lo puede observar o escuchar de aparente buen ánimo, si bien son pequeñas capturas de la vida, apenas un puñado de instantes pasajeros de un día.
Pero lo más curioso de todo es que en medio del problemón que tiene entre manos y que amenaza con terminar con 19 años de relación (Gustavo y Ximena se conocieron en Gran Hermano 2011, y desde entonces están juntos) es que el muchacho se hizo un tiempo para meter un chivo, lo que confirma que el mundo se puede estar viniendo abajo que los famosos no van a desaprovechar ninguna oportunidad para ganar unos pesos o sumar un canje. No está tan mal tampoco: de algo hay que vivir, más en estas épocas difíciles.
Por ahora hizo silencio. Ella no. Ella ya dijo lo suyo, mientras Conti se refugia en el mundo trespuntocero.