Cada día que pasa, MasterChef Celebrity sorprende a sus espectadores con algo nuevo. Más allá de los increíbles retos de cocina que presenta el jurado y la producción, las emociones y la pasión de los famosos le dan al reality un toque de dramatismo y sensibilidad.
En la gala del jueves, en donde un solo participante podrá salvarse de la gala de eliminación, las emociones estuvieron a flor de piel con la consigna que mostró Santiago Del Moro, en donde invitó a los famosos a destapar una caja para conocer su contenido, y en ella, todos se encontraron con fotos suyas de pequeños.
El reto constaba en poder preparar un plato, o utilizar un ingrediente que los llevara sentimental y mentalmente a aquellos días de inocencia y juventud. Automáticamente, al ver las imágenes, los cocineros se enternecieron y algunos revelaron sus historias de vida.
Patricia Sosa fue la primera en cumplir el pedido de Santiago Del Moro y “hablarle a esa niña”: “La vida pasa tan rápido que espero que aproveches el camino, que lo aproveches con una sonrisa porque nadie te dijo que esto iba a ser feliz. Tratá de ser feliz siempre, de no enojarte, de querer mucho a tus padres y por sobre todas las cosas, de no olvidarte de dónde saliste”.
Por su parte, el Turco García mencionó sus días de carencias y las dificultades que atravesó de niño: “Me hace recordar mucho a Fiorito y a Lugano. Vivía en una casa de chapa, no tenía baño y tenía el riachuelo al lado y hacíamos las cosas ahí en un pozo. Era muy pobre, pero tuve una infancia feliz y ahora el presente, estar acá, soy un agradecido de la vida por todo lo que pasé”.
No obstante, unas de las vivencias más duras fue la que relató El Polaco, en donde mencionó el amor a su padre y los conflictos que tuvo en su infancia: “Lo loco es que estoy a upa de mi papá y pocas veces lo tuve al lado mío, ayudándome a salir adelante y todas las cosas que logré prácticamente las hice solo. Mi viejo fue mi gran ídolo y mi gran debilidad. Siempre que pude ayudar ayudé, en su vida también hubo adicciones y todo, y tuve una infancia media triste. Pero lo perdoné. Fui un guerrero, salí adelante como pude y ayudé a mis hermanos”.
Además, Leticia Siciliani no pudo contener sus lágrimas al revelar que está alejada de sus padres para poder cuidarlos del coronavirus: “Es muy difícil poder hablar. Me dan ganas de ir a abrazar a mis papás nada más. Los estoy cuidando y no los veo hace muchos meses. También estoy acá para que mi mamá me vea y sepa que estoy bien y que no me falta nada”.