La bifurcación de caminos de dos almas puede abrir el escenario a diversas vertientes, maneras de comportarse y tomarse el siempre doloroso fin de una pareja. Existen casos de armonía total, así como miles de ejemplos de una tensión eterna, en un estadio de ebullición permanente.
Noelia Antonelli vive un presente profesional muy fructífero, con su participación en el ciclo nuevo de Telefe, Flor de equipo, y la conducción de un ciclo en la TV Pública, que se llama Todos estamos conectados, junto a Sergio Goycochea. Por lo cual su coyuntura le aporta felicidad en ese aspecto de la vida.
En cuanto al costado amoroso, Noe se divorció de Federico Seeber, el hombre de Canal 13 y TN, el año pasado y con quien tuvo a su pequeña hija Juana (5 años). Justamente en las últimas semanas corrió el rumor y ganó fuerza la versión de un romance fogoso del conductor con Carina Zampini.
"La separación ya fue hace un año y me parece bien que sea lo que tenga que ser", lanzó Antonelli.
Paparazzi se encontró con Antonelli a la salida de su labor con Flor Peña y le consultó sus sensaciones de la reconstrucción en el amor de su exmarido. Lejos de exhibir una energía negativa, la comunicadora le hizo un guiño al padre de su hija.
Ante la consulta de su visión del romance de Seeber con Zampini, Noelia sostuvo: “Por supuesto que estoy al tanto, porque leo y veo, pero no tengo idea. No sé si es cierto o no, porque realmente no lo sé. Tampoco me interesa mucho meterme en eso”.
En lo referido al desenlace de la separación, la periodista afirmó: “Fue en muy buenos términos, super bien. Nos llevamos bárbaro, tenemos una muy buena relación. Nos queremos un montón. La separación ya fue hace un año y me parece bien que sea lo que tenga que ser”. Con esas palabras dio a entender que no le molesta que su ex se enamore con la actriz.
A la hora de hablar de su actualidad del corazón, la animadora aseveró que no está en sus planes. “Por el momento estoy trabajando a full, así que muy tranquila, y muy de a poquito todo”, explicó Noe, con lógica por el tiempo necesario para sanar las heridas, por reconstruirse y digerir el cierre de una pareja de una década.
IMÁGENES: CARLOS GONZÁLEZ.
