Cuando comenzó MasterChef Celebrity, los famosos no solo destacaron la espontaneidad, enseñanza y diversión que vivieron dentro del ciclo, sino que además demostraron el enorme compañerismo que se armó dentro del grupo de trabajo.
Pero con el paso de las galas, y la presión que impone la semifinal de la primera temporada, los roces comenzaron a surgir y en la noche del jueves se vivió un tenso e incómodo momento cuando Sofía Pachano reclamó que alguien le había robado su preparación.
El caos en la cocina de Telefé comenzó cuando el jurado dio el paso a paso del reto de la noche: Preparar un lomo Wellington con una salsa original y un acompañamiento acorde al estilo inglés.
Los participantes debían limpiar su corte de carne, sellarlo y enviarlo rápidamente al abatidor para poder enfriarlo de manera correcta y que al continuar con su cocción no largara los jugos propios del lomo y no lastimara el resto del hojaldre.
Aunque todo parecía marchar bien, el caos se inició dentro del reality cuando Claudia Villafañe remarcó que el corte ya estaba frío y todos salieron rápidamente en busca de su ingrediente.
Pero en el cambio de manos y de movimientos, alguien tomó por equivocación la carne de Pachano, quien al darse cuenta de que lo que tenía entre manos no era de ella, disparó todo su enojo y acusó a sus colegas de haber intercambiado su lomo.
“Chicos, alguien se llevó mi lomo eh. Porque mi bandeja estaba arriba a la derecha, y no estaba en el lugar donde yo lo había dejado” comenzó aclarando la actriz quien luego explicó que además su preparación estaba “súper bien selladita” mientras que la que estaba en su estación, no.
Al darse cuenta que los únicos que utilizaron las mismas fuentes del mismo color eran ella, el Polaco y Analía Franchín, la hija de Aníbal se acercó a las islas de sus compañeros para comprobar rápidamente que no hayan tomado el equivocado.
Pero enojado, en off, el cantante tropical apuntó contra su colega: “No, yo renegando con un montón de cosas, al fondo, sin joder a nadie y me vienen a decir que yo me robé un lomo. No… Pará. El lomo mío es mío y yo lo tenía bien guardadito”.
El caos continuó, y enojadísima, Sofía continuó con su elaboración aunque dijo que no quería ir directo a buscar su corte de carne porque le parecía una mala actitud, aunque minutos más tarde, dejó entrever que desconfiaba de Franchín: “Estaba perfecto mi sellado, y este no. Nadie lo hizo de maldad, pero me enoja no haberlo etiquetado”.
Y picante, le apuntó directamente a Analía, dandole un consejo sobre los retoques en su cabello que lleva la periodista cada noche: “Mañana venite con un Wellington en la cabeza”.
¿Qué pasó realmente?
