Sin lugar a dudas, una de las cuestiones que más engancharon de MasterChef fue el intenso coqueteo y tensión sexual entre Vicky Xipolitakis y Germán Martitegui. Que sí, que no… ¿qué pasó finalmente tras el reality de Telefe?
Y como el pueblo merecía saber, en el paso de la griega por Cortá por Lozano le preguntaron en qué había quedado su novela con el carismático y exigente jurado. Directa, Vicky no esquivó la pregunta e incluso aprovechó para hacerle un reclamo al chef al aire.
"Martitegui tarda mucho en contestar los mensajes de WhatsApp, eh…", arrancó la rubia, a lo que Zaira Nara comentó que Germán debía estar ocupadísimo, con sus dos hijos, o “con las manos en la masa, cocinando”.
"Martitegui tarda mucho en contestar los mensajes de WhatsApp, eh…".
"Yo tengo uno que vale por cien… Le mandamos un beso por acá… ", retrucó Xipolitakis, haciendo referencia a su niño, Salvador Uriel. Y cuando le preguntaron cómo había sido el ida y vuelta entre los dos, la mediática dio a entender que en lo suyo con Martitegui hubo mucho de desencuentro.
"Cuando yo dije que había llegado hasta ahí porque el amor no se mendigaba, después sentí que me tiraba onda, me tiraba palos. Me hice la difícil y se terminó el programa”, contó. Pero, a la luz de lo que dijo ella, si la cuestión se enfrió simplemente fue porque Germán pecó, como tantos hombres, de lento y dormido.
"Cuando yo dije que había llegado hasta ahí porque el amor no se mendigaba, después sentí que me tiraba onda, me tiraba palos".
“Si bien hubo unos mensajes de por medio, como tarda tanto…", aseguró ella, y cerró, pícara: “Para mí tiene poca señal, cuando la recupere…”. ¿Se hará cargo, Germán?