En diciembre estalló el escándalo público. Al conocerse que Martín Redrado terminó su relación con Lulú Sanguinetti, Luciana Salazar hizo un duro descargo en tevé.
En ese momento, Luciana aseguró que el economista se separó de su novia de los últimos tres años por ella y su hija, Matilda.
En enero, mediante un viaje a Miami, Salazar y el asesor bancario recompusieron su vínculo y llegaron a un acuerdo en el que, incluso, volvieron a ser pareja y se reanudó el contrato que tienen en dólares.
Sin embargo, eso no duró mucho tiempo. Con la rubia de regreso al país y Redrado aún en Estados Unidos, se conoció una imagen que selló la reconciliación de Martín con Sanguinetti. Pero esta historia de encuentros y desencuentros supo incluir a una tercera en discordia.
Cuando el ex asesor del Banco Central y Lulú rompieron, él probó “suerte” con Tamara Bella, la integrante de Bienvenidos a bordo, el programa de Guido Kazcka, según pudo averiguar (y confirmar) Paparazzi.
Martín y Tamara, según fuentes allegadas al especialista en finanzas, se “engancharon” pero no lo suficiente como para intentar "algo más serio". Cuando ella creyó que se podía entrar y salir de la casa de Redrado, se encontró con una sorpresa: él cortó la relación.
Días atrás, sincera, fue la propia Tamara quien reconoció, también en el programa de El Trece, que había intentando con una relación pero que no prosperó.