Salvo los dos primeros días, cuando la exclusiva con Matías Morla le permitió promediar entre 5 y 6 puntos en las planillas de Ibope, Tv Nostra nunca logró buenas mediciones de rating. En medio de esa tempestad de números escasos y audiencias esquivas, Diego Ramos era, si se quiere, el único que surfeaba con buena cintura la marejada de pálidas y contratiempos.
Por sus habilidades como panelista, por los debates con Angela Lerena o por los elogios que recibía su impactante estado atlético (un sinfín de famosos, por ejemplo, lo eligieron como "su permitido" en el caso de tenerlo con sus parejas), Ramos siempre era centro de la escena. Incluso, hasta superando en debates y centimetraje mediático al propio Jorge Rial, a quien reemplazó cuando se fue a Miami a darse la vacuna contra el covid y por un par de emisiones ni siquiera pudo salir "por zoom".
Pero el viernes Rial anunció el sorpresivo y conmocionante final del ciclo, y Ramos no sólo se privó de seguir "disfrutando" de su buen presente. Para muchos fue el más perjudicado de todos los integrantes del programa, por la sencilla razón de que abandonó al consolidado Cortá por lozano para sumarse a la nueva aventura del ex Intruso. "Una pésima decisión", reflexionaron mayoritariamente en las redes sociales.
"Fue triste por quedarnos sin trabajo, y sorpresivo por enterarme una hora antes. Pero bueno, si esa fue su decisión, mucho no se podía hacer", le dijo Ramos a Paparazzi.
En contacto con Paparazzi, Ramos habló del terremoto de las últimas horas. "Fue triste por quedarnos sin trabajo" lamentó el actor, figura central de Sex, el transgresor espectáculo teatral que dirige y promociona como nadie José María Muscari. Al mismo tiempo, consideró que se trató de "algo sorpresivo por enterarme una hora antes".
Resignado, Ramos estimo que "bueno, esa fue su decisión, mucho no se podía hacer". Sin nombrarlo, hablaba de Rial, confirmando las primeras versiones que daban cuenta de que todos se enteraron del cataclismo sesenta minutos antes de salir al aire. Aún así, debieron afrontar las cámaras y la acción poniendo buena cara y mostrando su mejor ánimo.
El anuncio de Rial de la renuncia y la salida del aire del programa, al que desde un primer momento le costó encontrar una identidad definida, provocó un cisma no solo en América -que debió reprogramar gran parte de su programación en el horario central- sino también en toda la televisión, que desde el mismo viernes no hace otra que comentar, azorada, lo sucedido en Tv Nostra.
