Si hay alguien que conoce desde la intimidad el sufrimiento que Benjamín Vicuña atravesó durante los últimos nueve años es la China Suárez. Porque más allá de las crisis que los separaron en mas de una oportunidad, estuvieron muchos años juntos y compartieron sus vidas.
María Eugenia y Benjamín forjaron una relación que comenzó bastante después del impensado fallecimiento de Blanquita, en aquel fatídico comienzo de septiembre de 2012, en Chile. Y con el tiempo y la confianza adquirida, se entiende, las charlas fueron cada vez mas profundas, independientemente del presente de la relación entre ellos.
Y aunque por largo tiempo Vicuña no quiso hablar con la prensa de lo sucedido y de la lamentable perdida de la nena fruto de su matrimonio con Carolina Pampita Ardohain, con su pareja sí lo hizo. La China siempre acompañó su dolor.
Y en un nuevo aniversario de aquel trágico suceso, Vicuña publicó un escrito dedicado a Blanquita, como suele hacerlo todo los 8 de septiembre. Además, se hizo una misa de homenaje en la que comparte con sus otros hijos y con Pampita.
"Hace nueve años, se detuvo el tiempo en tu mirada. Una mariposa longeva desplegó sus alas y yo intenté leerla como un papiro, sin entender la letra. Desde ese día, te lleno de cartas mi niña, cartas que van al cielo como mariposas borrachas. Te cuento nuestros días e imagino los tuyos", comienza el mensaje que postea Benjamín.
“Nueve años que te disafrazaste de estrella, la más linda de todas. Nueve años que brillas en nuestras miradas. Blanca mi niña libre, Blanca que habitas el silencio y bailas en medio de la risa de tus hermanos. Blanca que viajas en el tiempo. Sólo escribo para detener ese tiempo y volar entre las cartas. Escribo para ver si te quieres cambiar el disfraz por uno de estrella fugaz, para verte más cerca. Para saber qué estas cartas llegan y si cuando tililas en la noche, es porque escuchas mis rezos", continúa el escrito de Vicuña.
"Sigue brillando, mi niña, que la noche asoma nuestras almas a las ventanas y podemos rozar tu pelo como una caricia, como una bicicleta estelar con rueditas que viaja, como mariposas que confunden a los amantes, como señales que caen en forma de gotas sobre mi cara, lágrimas dulces, mi amor", finalizó Benjamín.
Y ante estas sensibles palabras, a pesar de hoy no ser pareja y estar separados hace casi tres semanas, la China tuvo un amoroso gesto con quien es también papá de dos de sus hijos, Magonolia y Amancio, al que le dedicó tres tiernos emojis de corazones en color blanco, color que simboliza pureza y suele ser el elegido por el actor y Carolina para elevar globos al cielo en nombre de Blanquita, incluso dejando de lado los daños económicos que significó la separación entre Suárez y Vicuña.