El mundo se detuvo durante más de una semana. Suena exagerado, pero realmente el mega escándalo que protagonizaron Wanda Nara, Mauro Icardi y la actuación estelar de China Suárez provocó un interés desmedido, que alcanzó trascendencia internacional.
Tras varios días de mantener en vilo a la opinión pública y amagar con divorciarse, así como ejecutar una crítica durísima contra María Eugenia, el lunes se produjo un bombazo. Wanda saltó a Instagram para anunciarle al planeta que había exculpado a Icardi, que le perdonaba todo, todo ese coqueteo virtual con la ex de Benja Vicuña.
Desde ese punto se encendieron los análisis del texto de Nara, en el que asegura que firmó los papeles legales de separación y en el que asegura que una carta de Mauro la empujó a dar marcha atrás y apostar de nuevo por la familia y el amor.
Cientos de voces saltaron a los medios, y las redes sociales, para expresar su lectura del hecho, su visión de todo este entuerto. Así llegó una opinión muy picante de Augusto Tartúfoli, que en su Twitter emanó una concepción filosa, que muchos abogan.
El periodista no le creyó nada a Wanda, considera que todo es parte de un adoctrinamiento y augura un escaso futuro del matrimonio. "Lo que hizo Wanda es una sobreactuación para disciplinarlo, látigo en mano a Mauro para que la pareja dure algo más. A Mauro le abrieron la puerta para salir y se metió adentro de nuevo. Algo más van a durar", escribió.
Claro que muchos caminan por ese sendero, el que refiere a un aprovechamiento de la situación de Nara para conservar a su esposo controlado. Así como muchos otros creen que directamente todo es mentira.
