La entrevista de la China Suárez con Alejandro Fantino fue una de las más esperadas junto con la de Wanda Nara. La de la blonda decepcionó mucho, pues prefirió no dar detalles nuevos sobre el tema y Susana Giménez tampoco ahondó lo suficiente, a diferencia de la actriz, quien dejó en claro que no hablaría pero aún así fue interesante.
Quizás el carácter de la China tenga mucho que ver en cómo influye en la gente; y es que, siempre se ha mostrado muy misteriosa, es una de las mediáticas y polémicas de los medios argentinos pero una de las que casi nunca sale a hablar de los temas que la rodean. Con un simple silencio, Suárez puede hacer que el mundo arda a sus pies.
Antes de que la entrevista se transmitiera por la pantalla de Star+, la China ya había dejado en claro que no hablaría acerca de aquel famoso Wanda Gate. "A los únicos que les voy a dar explicaciones cuando me la pidan es a mis hijos", reveló y así dejó en claro que está dispuesta a mantener el silencio y llevárselo hasta la tumba con ella.
Luego de que todos pudieran ver la charla entre los famosos y conocer a la China un poco más a fondo, Alejandro habló del tema en el programa "A la tarde", donde contó cuáles fueron las condiciones que la actriz le puso antes de iniciar y de que se prendieran las cámaras. Además confesó que luego de eso, la respeta muchísimo.
"Algunas puertas no se abrieron porque ella no tenía ganas. Me cerró algunas puertas cuando quise entrar al caso en sí. Ahí me dijo que las explicaciones se las debía sólo a los hijos y no iba a hablar del hecho. Y no puedo violentar una puerta si ella la cierra", reveló Fantino.
Y cerró al decir: "Voy a revelar algo: yo tuve un off con ella. Mientras ustedes estaban al aire, yo charlaba con ella y dos personas más de su equipo. Ese off no lo rompo ni bajo ni por un pedido de un juez federal. Ese off no me permitió preguntar algunas cosas después. Me contó un montón de cosas que quedan entre ella y yo. No lo llevé a la entrevista".
