Juana Viale no es una mujer cualquiera, ella es una “hombreriega”, como dijo hace un tiempo para callar a todos los que la señalaban y cuestionaban por salir con muchos caballeros en sus años de soltería.
Sin embargo, hace un tiempo considerable que Juanita está “tranqui”, muy de novia con Agustín Goldenhorn, el arquitecto con el que se va a casar y con quien se está construyendo una casa circular para apostar a la familia ensamblada.
Pero, pero, pero… estar en pareja no le quita a Juani el deleite de los placeres sensoriales de la piel, al menos, arriba del escenario, donde actúa con Joaquín Berthold, su galán en la obra El Ardor, actualmente en cartel en Punta del Este.
Claro que, al margen de los mimoseos en escena, a Juana y a Joaquín se los ve muy compinches y cómplices debajo de las tablas, lo que despertó las suspicacias de Rodrigo Lussich, que se despachó en Intrusos con las preguntas e interpretaciones del caso.
“¿Es un poliamor moderno, en el que nosotros somos los boludos, que no entendemos nada?”, se preguntó el conductor, y siguió, picante: “En la relación de Juana con este actor, Berthold, viene de antes. ¡Y ahora están en un escarceo!”.
“La obra se llama El Ardor y parece que están ardiendo… Ya hay una cosa de manitos que ya ni se disimulan, hay unas manos que tienen tensión sexual, según nuestro laboratorio de escandalones”, se mandó, nomás.
Y el uruguayo dio más detalles del muchacho en cuestión: “Este rubio trabajaba en ATAV y parece que es un demonio, y Juana es moderna, libre. Ella se caracterizó como ‘hombreriega’, es un término que le pertenece, que se adjudicó”.
Para más datos, Berthold tiene 41 años, fue arquero de la selección nacional de hockey y hasta filmó con Will Smith. Como Viale, tiene chicos y tampoco está casado. “Estoy juntado hace trece años con Luciana, la madre de mis hijos, Lautaro, de 12, y Malena, de 6 años. Fue mi novia cuando éramos chicos, a mis 17”, dijo.
Como sea, los dos andan a pleno con este romance ¿platónico? de verano. Ella comparte entusiastas fotos de la obra y él, postales donde se los ve comodísimos y muy cómplices. “Juana es puro placer, complicidad, disfrute, ella es todo energía!!!”, describió Joaco a su compa, con un corazón rojo.
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