En los últimos días brotó la versión de una inminente grabación de la segunda temporada de Argentina, tierra de amor y venganza, esa serie que produjo PolKa en el 2019 y que cosechó elogios por la factura, por la extensión del elenco y por las mediciones del rating.
Se estima que Adrián Suar planea continuar la historia en la década del 80, con las secuelas de la trama de esa novela tan espectacular, en la que la pareja central se configuró con la China Suárez y Gonzalo Heredia, además del papel oscuro y decisivo de Benjamín Vicuña.
Esa trama se adentró en el corazón de miles de espectadores, porque logró mixturar una realidad muy sensible y compleja, así como horrenda, de esas épocas como el engaño a mujeres para sustraer su libertad, con una historia de amor poderosa.
Claro que la coyuntura de la señal de Constitución dista de la ideal, porque le cuesta encontrar solidez en las mediciones para acercarse a los números globales de Telefe. Motorizado en ese anhelo de engrosar el rating toma más fuerza el proyecto de una segunda temporada de ATAV.
No obstante, la realización de una continuidad de la serie se topa con varios contratiempos, que no solo se remiten a la trama, sino a los protagonistas, a los actores y las actrices. Y en ese contexto explotó en las últimas horas una negativa explosiva.
Resulta que trascendió que los representantes de Vicuña y Suárez se comunicaron con Adrián Suar para adelantarle que no existe ningún tipo de posibilidad de trabajar juntos. Tras la separación de la pareja, que se produjo en septiembre del año pasado, no poseen ganas de reencontrarse en un proyecto laboral.