Santiago del Moro suele ser un personaje neutral dentro de las cocinas de Masterchef, pero donde más se observa su participación es en el mercado. Esta vez, decidió opinar mucho más y aumentar la competencia entre los famosos. Esto no le gustó nada a la venezolana, que terminó comparándolo con el diablo.
El desafío más complicado se presentó al principio de la noche. Los 8 mejores cocineros de esta edición ingresaron al programa y se encontraron con cajas de madera en sus estaciones. Cuando las levantaron, descubrieron que debajo habían figuras de cartón con la cara de sus compañeros. A cada uno le tocó uno diferente. Hasta ahí, todo normal.
Lo divertido se dio cuando los famosos se enteraron que debían entrar al mercado, no para buscar sus propios ingredientes, sino que podían elegir la comida del compañero que les había tocado. Por ejemplo, Denise Dumas iba a poder escoger los ingredientes con los que tendría que trabajar Cathy Fulop. Por supuesto, este fue un plan del jurado para poder avivar la competencia.
Al momento de entrar al mercado, salió la maldad de todos los participantes. Pero quien más disfrutaba de la situación era Del Moro, quien les sugería los ingredientes más difíciles. "Mica meté unas anchoas", alentaba el conductor a Viciconte, que buscaba los peores alimentos para la canasta de Peque Pareto. "Cereza, mirá. Cereza y anchoas", le dijo Santiago con risa cómplice a Mica.
"Mirá Cathy, tomá", le propuso a Del Moro, levantando una sandía enorme. "Yo creo que Santiago es acá en el mercado, el diablo personificado", confesó Fulop durante el backstage al ver la actitud que tuvo el conductor.
Esta entrada al mercado terminó en una masacre, ya que ninguno de los participantes tuvo compasión de sus compañeros, y escogieron ingredientes casi imposibles de combinar. Excepto por Pareto, que fue bastante buena al momento de elegir la comida para Viciconte.