Cada pareja es un mundo, reza el refrán popular. En ese universo peculiar, existen quienes respetan a rajatabla la individualidad del otro, y aquellos que no pueden contener la pulsión de ingresar, clandestinamente, en sus dispositivos celulares.
Analía Franchín no anduvo con vueltas, evitó los filtros de lo políticamente correcto y gritó en Telefe que desea revisarle todo a su marido Sebastián Eskenazi. Aunque, también contó que una traba tecnológica le impide llevar a cabo su plan.
Esta honestidad brutal de la ex Intrusos se produjo en Flor de equipo y en el contexto de la visita de Pamela David, quien admitió que experimentó durante años una inseguridad enorme con su marido Daniel Vila, con ataques de celos que la complicaron.
En ese contexto, Analía no pudo contenerse y reveló: “Yo le reviso todo, todo. No lo hago porque con la huella me cag…”. De ese modo, la ex MasterChef describió la complicación que afronta desde la implementación del registro dactilar que ejecutó su esposo.
En cuanto en el piso le cuestionaron que no modificó su comportamiento por maduración, sino por un impedimiento de la tecnología, Franchín aceptó: “Sí, evolucioné un montón pero si pudiera y no tuviera el celular con huella un poquito miraría”.
Y para remarcar que su pareja se maneja en las antípodas de esta característica suya de los celos, o la invasión a lo privado, la panelista detalló: “Mi marido no lo revisaría. Igual mi hijo tiene la clave de mi celular. Cuando todo está tan suelto, pierde interés”.