Guillermo Pardini experimentó un viraje radical en su cotidianidad, a partir de una denuncia de una pareja por violencia de género, que se produjo allá por 2019. Una acusación muy grave, que lo indujo en un proceso judicial y sobre todo en secuelas en otras aristas de su vida.
Como un bola de nieve que caía por la ladera, todo se desmoronó para el periodista, que se hundió en una pelea por clarificar la situación y al unísono las ofertas laborales comenzaron a escasear, al límite de tener que recurrir a decisiones desesperadas como vender varias pertenencias.
Con mucha valentía, Guillermo reconoció, hace unas semanas, que la salud económica lo indujo a sentarse en su auto a trabajar como remisero. Además de expresar su alivio por la resolución de los tribunales, que lo sobreseyeron en la causa en su contra.
Esa visibilidad de un presente complejo, adverso, parece que generó un rebote positivo, porque Pardini acaba de contarle al mundo, a través de sus redes sociales, que regresó a su vocación, a desarrollar su oficio en el periodismo. Una excelente noticia.
El comunicador posteó una foto en el interior de la redacción del Diario Popular, que confió en su expertise y le brindó esta oportunidad de retomar sus actividades habituales. Con una sonrisa plena en su rostro, el ex Indomables compartió su alegría.
A la imagen en el escritorio, con una computadora encendida de fondo, y un buen look, Guillermo escribió las sensaciones que navegan por su ser: “De nuevo en las pistas. Gracias Diario Popular”.