Supieron cultivar una confrontación histórica, una rivalidad que evolucionó a límites muy picantes y que sobre todo se sumergió en el inconsciente colectivo como una verdad absoluta. Dos posturas ante la vida, dos personalidades disímiles que se diferencian entre una mayor empatía y una competitividad extrema.
Mica Viciconte y Flor Vigna protagonizaron durante años una especie de enemistad, que surgió de sus épocas en Combate, donde edificaron jornadas de muchísima disputa en la dinámica de los juegos y donde crecieron sus fandoms, su grupo de seguidores acérrimos.
Lo cierto es que hace unos meses, la actual novia de Luciano Castro confesó públicamente que todo eso quedó en el pasado y que supo tomar un aprendizaje de esos años caminando por veredas opuestas con Viciconte. "Fue como si el destino me dijese: 'Voy a ponerte a esta rubia en el camino para que te despiertes un poco'. Me enseñó a discutir, a hacer valer mis ideas con palabra y corazón", contó.
En un momento como el actual, en el que la pareja de Fabián Cubero acaba de convertirse por primera vez en madre, tras el nacimiento de Luca, que se produjo el viernes en la clínica Suizo Argentina, Vigna tomó una postura interesante.
La bailarina se animó a mostrarle a todo el mundo sus deseos y buenos augurios para Mica y saltó al posteo que subió la ganadora de MasterChef, con el que le expresó al planeta la felicidad que la inunda por el aterrizaje en este planeta de su bebé.
Vigna demostró que tiene buenas intenciones y comentó en el feed de Viciconte: “Dios mío, que locura este momento, vas a ser una mamá increíble". Una declaración sorpresiva teniendo en cuenta la rivalidad que las separó durante añares.
