Hace cuatro años, Luciana Salazar cumplió el gran deseo de ser madre cuando Matilda llegó al mundo. La hija de Luli nació por método de vientre subrogado, se convirtió en el sol de su vida y, hoy, en uno de los motivos de guerra con Martín Redrado, a quien le reclama varios meses de cuota alimentaria.
Según contó Salazar, su ex acompañó su proyecto de ser mamá desde el día uno. Él pagó el tratamiento por el que la rubia tuvo a su nena e incluso, hasta hace poco, también se hacía cargo del costo de mantener sus óvulos y embriones congelados en Estados Unidos, a la espera de ser usados.
La posibilidad de tener otro hijo siempre está, sin embargo, Lulipop contó en Socios del Espectáculo que la nena no está dispuesta a ceder su trono de hija única. Todo empezó cuando le preguntaron cómo se ponía Matilda cuando la veía acompañada por un hombre.
“Es bastante celosa, a veces le pregunto: ´Mati, ¿te gustaría tener un hermanito?´. ´¡No!´, me dice, rotundo”, dijo la rubia, replicando con la mano el gesto que le hace la niña cuando ella saca el tema.
¿Y Luciana quiere volver a ser mamá? “Si ella me dice que no, ya está. Yo, mi sueño de ser madre, ya lo cumplí, era mi deseo absoluto. Ahora, si la vida más adelante me da otra oportunidad, bienvenido sea, siempre un hijo es bienvenido”, señaló la mediática, que frecuentemente es criticada por los looks de su pequeña.
Luego explicó que en este momento volver a ser madre no es un tema para ella: “Hoy por hoy, yo estoy bien así, más siendo madre soltera. Me parece que dos es demasiado, yo me ocupo mucho de Matilda”.
Y siguió: “No solo en sus tareas extracurriculares, sino en el día a día, la educación, el estar pendiente; me ocupo mucho en que sea una niña muy educada”. Finalmente, Luciana se mostró emocionada por el feedback que recibe de parte de las mamás de sus compañeritos de jardín.
“Cuando la gente que la conoce te habla bien de tu hija, para mi es re gratificante”, reconoció la sobrina de Evangelina Salazar, con los ojos brillosos.
