Desde que Tomás Holder se fue de la casa, Juan Reverdito quedó odiado y no hizo nada para disimularlo. El taxista se aisló del resto del grupo, empezó a comer solo y a poner mala cara por cualquier cosa, además de hacer explícito su deseo de ser el próximo nominado para el domingo 31 de octubre.
Juan logró su cometido y fue a placa junto con sus aliados del grupo “Los monitos”, Nacho y Martina; y Walter “Alfa” Santiago. Y en las últimas horas, el hombre que encaró a Maxi y el Conejo y los acusó de robarle cigarrillos, reveló en el confesionario a quiénes detesta en el reality.
Los ánimos están caldeados y ya nadie se banca a Juan, que le aseguró a Gran Hermano que ahora, al quedar nominado, se siente bien. “Tengo buena vibra ahora porque me doy cuenta de que ya dependo de la gente. Ellos deciden si quieren que me quede”, dijo.
“A mí me votó la mayor parte de la casa. Obviamente, que me votaron todos los hombres menos Nacho”, siguió analizando el juego, sentado en el lugar de la casa donde el resto de los participantes no puede acceder.
Y luego estalló con una revelación sin concesiones: “Hay gente que me cae muy mal acá adentro”. Cuando Gran Hermano le preguntó quiénes eran, Reverdito no dudó en ventilar su lista negra: “Me cae mal el cordobés (Maxi), Alexis, Marcos, Thiago. No tienen respeto por nada, entonces ya me molesta escuchar sus voces”.
Finalmente, Juan concluyó que cree que es “el indicado” para quedarse en la casa, aunque reconoció que sus últimos días no fueron buenos: “Estuve mal porque me pasaron varias cosas… Creo que no estoy jugando bien, creo que me bloqueé”.
“No fui yo y eso me jugó en contra. Creo que si salgo bien en esta placa, se viene el juego de verdad”, terminó. “Juan está muy enojado, no era así cuando entró, condiciona a su equipo, a Nacho lo tiene totalmente cooptado”, opinó luego Santiago del Moro, en el estudio.
Y Gastón Trezeguet opinó con contundencia sobre el destino de Juan: “Lo mejor que le podría pasar a la casa es que se vaya Juan. Él está enojado consigo mismo”.