En abril de 2022, Fede Bal tuvo un grave accidente en parapente mientras grababa para Resto del mundo, en Brasil. El motor del aparato cayó sobre su brazo al quedar envuelto en una repentina corriente de aire y Bal sufrió fractura expuesta en uno de sus brazos.
El hijo de Carmen Barberi fue operado de inmediato en Río de Janeiro y a los pocos días se reincorporó a las grabaciones del programa. Y ahora, a meses del tremendo susto, Fede está a punto de lanzarse a un gran desafío: ponerse en la piel de Lola, la protagonista de Kinky Boots.
Entrevistado por el móvil de Implacables y muy feliz de cara a su nuevo proyecto, el actor aprovechó para mostrar cómo quedó su brazo luego del accidente. “¡Te lo merecés con todo lo que estás pasando, Fede! Que el bracito, que la enfermedad que superaste”, lo felicitó la cronista.
“Estoy tajeado, ¿ves?”, siguió Fede, señalando su brazo. “Tengo varias placas, tornillos, me abrieron el antebrazo. Señora, no se asuste, estoy bien”, agregó, llevando tranquilidad al público del programa que conduce Susana Roccasalvo.
“Me subí y salió mal. Puede salir mal. La vida es eso, también”, cerró Bal, reflexivo sobre lo que le tocó vivir este año, apenas dos años más tarde de enterarse de que padecía cáncer, enfermedad que superó tras someterse al tratamiento indicado.
“Fueron momentos de mucho miedo. Yo soy muy aventurero, me gusta eso, pero el tema es estar lejos y caer en una guardia de un lugar que es bastante rústico. Imaginate que en la guardia local te puede agarrar un médico que considera que hay que cortar la mano y te la debo...”, había contado el artista en Intrusos, tras su caída en Paraty.
En ese momento, Fede Bal reveló que le habían dado 30 puntos en el brazo y que por delante tenía un largo camino de rehabilitación para recuperar sensibilidad y movilidad de la mano. Sin embargo, anticipó que en 20 días pensaba volver a subirse a un avión para seguir adelante con su programa. Y así fue.