La salida de Alfa de Gran Hermano no alegró únicamente a Romina, Marcos, Nacho y Julieta, sus principales competidores dentro de La Casa. Las autoridades de Telefe también encontraron motivos para celebrar fuerte su partida: desde que el veterano jugador abandonó el juego el rating del canal no paró de crecer, y su presencia en "El debate" marcó un récord absoluto de audiencia con números para el asombro.
Mientras renombradas y populares figuras de la farándula sacan pecho en sus redes sociales por llegar a 3, 4 o 5 puntos y los destacan como si fueran verdaderas proezas, el hasta hace 5 meses ignoto Walter Santiago hizo explotar "las agujitas de Ibope" y llevó las mediciones del lunes a una máxima increíble, con picos que superaron los 28 y en algún momento amenazaron con tocar los 30, una marca definitivamente inalcanzable para cualquier programa común y corriente.
En realidad, la "Alfamanía" alcanzó a todos los ciclos de la emisora, que desde temprano le dieron "duro y parejo" a su eliminación del realitie tras un reñido cabeza a cabeza con Romina que muchos creyeron un anticipo de lo que puede pasar en la final. No como aquel Marianela Mirra-Diego Leonardi de 2007, pero parecido. La diferencia fue que, aquella vez, la tucumana se sacó de encima a su principal rival y se fue derechito al título. Ahora, si bien salió fortalecida, Romina debería sortear los favoritismos de Marcos, Nacho y Julieta para ceñirse la corona.
Aunque sin la presencia del "hombre de la bandana", que recién apareció en pantalla por la noche para participar del debate, A la Barbarrosa fue el primer espacio que le sacó el máximo jugo posible a la derrota de Alfa. Por primera vez desde su debut, el magazine mañanero alcanzó los 10 puntos reduciendo a una mínima expresión a todos sus competidores.
Atento al "fenómeno" que estaba despuntado y bajo el lema "equipo que gana no se toca", Corta por lozano siguió con "la eliminación de Alfa" como tema principal y volvió a dispararse del resto de los canales, llegando a los 12 puntos, lo que le permitió triplicar a la competencia directa y duplicar al resto de los canales sumados, algo pocas veces visto para un día común, sin mundial o alguno de esos acontecimientos mega convocantes. Era un presagio de lo que sucedió a la noche.
Cuando Santiago del Moro arrancó "El debate" y presentó a Alfa, había "medio país" atrás de los televisores. Los números directamente se dispararon a niveles inusuales para la tele de hoy. 22, 24, 25, 26, 28. Y ahí frenó, cuando muchos ya se imaginaban descorchando champán por los benditos 30 puntos. Igual no se pueden quejar. Para nada. ¡El promedio fue de 25, el programa más visto del año! Y ya saben todos: mientras siga "midiendo", van a tener a Alfa hasta en la sopa.