Las semanas avanzan en Gran Hermano y muy cerca de su último tramo, Julieta Poggio se reveló como una excelente estratega. De hecho, fue la única que logró lo que parecía imposible: sacar a Alfa del juego al salvar a Camila y medirlo en una placa mano a mano con Romina.
Y ahora, que la casa parece serena, Juli demostró que tiene ganas de volver a revolucionarlo todo de la mano de un recurso que, hasta ahora, nadie jugó: la carta de la fulminante, aquella que lleva al participante fulminado a placa directo.
Con sólo siete participantes y a horas de una nueva gala de nominación, la situación en la casa, más que nunca, es la de un tablero de ajedrez. ¿Por qué no dar el batacazo y fulminar de una vez, antes de que sea tarde? Así lo dio a entender Disney, mientras charlaba con la líder de la semana.
“¿Vos que pensás, si hacés la fulminante, te lo avisan el día que vas a nominar? Tipo, si yo quiero nominar a tal persona y te dicen que no porque ya está fulminada. O te lo avisan antes, antes de ir a nominar”, le consultó a su amiga en el jardín.
“No, para mí si vas a nominar te lo dicen”, contestó la ex diputada, que para esta placa tiene inmunidad. “Jajaja hija de mil, ya estás pensando…”, se rió. “Si no la usás ahora, más adelante no se puede usar”, sostuvo entonces la modelo, que parece muy decidida a lanzar la primera fulminante de la edición 2022.
Luego de esa escena, se vio a Juli en el confesionario, por ahora, al parecer, para aclarar sus dudas. Sin embargo, sólo se mostró el pedido inicial de esa conversación que quedó en privado: "Tengo una pregunta. Es algo con respecto a la fulminante…".
Pero Juli no tuvo en cuenta un detalle: que Nacho la vio yendo al cuartito rojo. Luego, en el dormitorio, el rubio le compartió sus sospechas a La Tora: "Aparte le dije 'epa' y me dijo '¿qué te pasa a vos?'. Mmm… ¿A quién se la habrá hecho? ¿A mí?".