Marina Calabró tiene muchos años en los medios. Además de ser hija de Juan Carlos Calabró, se formó en ciencias políticas y decidió orientarse para la comunicación. Así logró forjar una carrera como periodista habiendo participado en exitosos programas tanto de radio como de televisión.
Además de ser la encargada de sacar a la luz picante información y saber manejar a la perfección los juegos internos del medio, dejó en claro en más de una oportunidad que entiende cómo son las reglas del juego en el ambiente artístico y por eso tomó una decisión.
Recientemente, Marina Calabró sacó a la luz que ese conocimiento del medio la llevó a no tener una cuenta en Twitter, una de las redes sociales que más maneja la agenda en la actualidad y, sobretodo, en el mundillo del espectáculo.
En diálogo con Infobae, la periodista contó por qué desistió de sumarse: "Me jode la crueldad y por eso no tengo cuenta de Twitter. No me la banco y lo reconozco, no te la voy a caretear. Hay gente ahí, con nombre y apellido que no conozco y ni sé por qué me agreden”.
EL ENOJO DE MARINA CALABRO
“Me parece que uno tiene derecho a decir 'compro o no compro’ o a decir ‘me someto o no me someto’. También conozco un montón de gente que ya ni te diría les resbala: ni se enteran. Pero a mí todo me duele, me afecta”, agregó.
"Yo armé una cuenta sólo para seguir postales de opinión, para tener la info concentrada ya que me viene bien cuando estoy al aire en un noticiero pero nada más”, cerró el tema.
Otra cosa que le aterra a Marina Calabró es buscarse en Google: “Nunca me googleo, nunca pongo en Twitter ‘Marina Calabró’ porque no quiero leer. Vos podés tener tu opinión sobre mí y expresarla pero yo tengo derecho a no querer saber lo que opinás de mí".