El origen de esa incomodidad, de esa nula relación se remite a su ingreso tardío a la dinámica de la casa y probablemente al lazo cercano que creó con Alfa. Romina y Camila no vibraron en consonancia en Gran Hermano, todo lo contrario.
La blonda reconoció en varias ocasiones que se sintió como víctima de bullying por parte de la ex legisladora. Una situación que no varió en su consideración con el transcurso del tiempo desde el cierre del reality más impactante d de la televisión argentina.
Ahora, Lattanzio ahondó en los factores que inciden en su mente para evitar un contacto con Romina. En una entrevista con Ulises Jaitt, en su ciclo radial, la rubia evitó los eufemismos y disparó con claridad: "Yo siento que es mala con las personas que quiere, con las que quiere ser mala. Después no es mala mina, es depende con quién".
Ante la pregunta sobre si se reuniría en algún contexto más privado con Uhrig, Camila exclamó con absoluta vehemencia: "No, no me sentaría. No hay relación”. Aunque especificó que la odia: “Yo con lo que pasé adentro, no le tengo odio ni rencor, la perdono. Pero prefiero no juntarme”.
POR QUÉ CAMILA NO CENARÍA JAMÁS CON ROMINA
Y para resumir y condensar lo que piensa de Romina, así como los motivos que tallan para no cenar con ella, Lattanzio asestó: “Con la única persona que no me sentaría a comer es con Romina. Si la veo, no me acuerdo de todo lo que me hizo, no soy rencorosa. No le daría ese lujo de estar al lado mío".
"Yo entiendo que entré nueva y pude causar incomodidad que pudo haber llevado a tratarme mal. Pero bueno, yo siento que la maldad de uno, es algo que esa persona siente consigo misma", opinó Camila respecto a las características que detecta de Uhrig.