Piñón Fijo se transformó en noticia por un entramado íntimo, del fuero de la familia y más precisamente de su lazo con sus nietos. Una discrepancia con su hija Sol que tomó estado público y que lo sumió en una lejanía de esos pequeños familiares: Luna (7 años) y León (1).
Una historia que inundó los medios hace un año y que tuvo algunos episodios más, como un posteo reflexivo del payaso cordobés que refería al dolor de no poder abrazar y jugar con los gurrumines. Tras el ruido y toda la controversia se articuló un periodo largo de silencio.
Hasta que este lunes Piñón enfrentó las cámaras de A la tarde, el ciclo que conduce Karina Mazzocco en América y se animó a hablar del caso. Siempre con un discurso muy cuidado, en pos de evitar alguna palabra incómoda o que pudiera activar un enojo de sus hijos.
A pesar de medirse en sus declaraciones, el artista reveló que existe un acercamiento de partes al aseverar: "Estamos en un proceso hermoso e íntimo de reconstrucción de una cantidad de cosas que nunca tendría que haberse filtrado a los medios".
PIÑÓN FIJO HABLÓ DE SU PELEA FAMILIAR
Sobre la tirantez con sus dos hijos, Piñón Fijo aclaró el nuevo escenario: "Todavía tengo vínculo con mis hijos, y lo estoy tratando de reconstituir puertas adentro". Y añadió un poco más de pormenores: “Está a puertas materiales cerradas, pero las puertas del corazón están totalmente abiertas”.
Hasta que finalmente, el hombre que ilumina con sonrisas a los más chicos explicó las buenas novedades: “Es lo manejamos en familia. Queda ahí. Lo que se está tratando de reconstituir queda en la intimidad familiar". ¿Se vendrá la reconciliación definitiva?