Atravesó el portal hacia un calvario, un terreno fangoso, lleno de oscuridad y dificultades. Ezequiel Lavezzi camina por un presente adverso, que se configura por su reciente internación de urgencia en una clínica psiquiátrica para abordar sus problemas con las adicciones.
Recientemente, el ex delantero de la Selección Argentina protagonizó un confuso episodio en Punta del Este, del que trascendió que intentó lastimarse con unas tijeras, para luego viajar al país y tratar de refugiarse en su familia. No obstante, otro brote lo obligó a plantarse ante una dicotomía.
Según revelaron, el Pocho entendió el pedido desesperado de sus seres queridos y aceptó firmar los documentos para sumergirse de lleno en un centro de rehabilitación, en el que se instaló hace pocos días y que implica un aislamiento sincero de todo.
Dentro de todo el hermetismo, lógico, de su actualidad en esa clínica se acaba de filtrar una gama de declaraciones de Lavezzi que conmueven. El dato surgió en Socios del espectáculo, de la mano del panelista Matías Vázquez, quien leyó las palabras que le transmitió el ex futbolista.
LA DESGARRADORA FRASE DE LAVEZZI EN SU INTERNACIÓN
En primera instancia, Ezequiel se refirió a todas las versiones que trascendieron y exclamó: “Los medios son una mier… Dijeron que (yo) me había apuñalado en Punta del Este y después lo de la sobredosis”. Una manera de desmentir diversas confusiones.
Respecto a su problema y el entendimiento de que no lograría sin ayuda, el Pocho admitió: “Igual, venía zarpado. No quedó otra que venir a internarme. Intenté limpiarme solo en la casa de Pilar y no pude”. Hasta que llegó el punto más emotivo y desgarrador.
Lavezzi explicó todo lo que late en su interior, las complejidades de este trance y principalmente señaló la búsqueda de fuerzas para ganar esta batalla cruel: “Cuesta, pero le tengo que meter ganas, reorientar mi vida, mis hábitos y todo esto hacerlo por mi hijo”.
