Las rupturas suelen tener una faceta complicada en la vida de cualquier pareja, pero todo se acrecienta si hay chicos de por medio, y más, si son pequeños. La modelo Julieta Prandi apostó al amor y estuvo diez años casada con el empresario Claudio Contardi, sin embargo, el amor se terminó y en diciembre presentó el divorcio de forma unilateral.
Durante un tiempo estuvieron viviendo bajo el mismo techo, aunque separados, hasta lograr decidir quién se iba a ir de la casa y cómo contarselo a los chicos.
"En diciembre presenté el divorcio de forma unilateral, avanzamos con eso, en el verano me fui con los nenes de casa y antes de eso lógicamente hablamos con Rocco y Mateo", contó Julieta en una nota con Pronto. Y, para hacerlo, pidió ayuda profesional: "Fuimos a una psicóloga para que nos oriente qué palabras utilizar más correctamente y que los nenes nos entiendan sin darles información de más".
"Lo hablamos, Mateo lo entendió y Roquito lo comprendió desde otro lugar porque es más chico. Entendieron que seguimos siendo una familia, solo que su mamá tiene una casa y papá tiene la suya. Es así" concluyó la rubia que protagonizó uno de los programas más recordados de la televisión junto a Guillermo Francella.
"ENTENDIERON QUE SEGUIMOS SIENDO UNA FAMILIA, SOLO QUE SU MAMÁ TIENE UNA CASA Y PAPÁ TIENE LA SUYA"
Cuando se inició la separación, Prandi había contado en el ciclo PH, Podemos Hablar, que “la ruptura no se había dado en los mejores términos” y que era “un divorcio complejo”, ya que el empresario no quería irse del hogar. Además, la actriz también había revelado que el caso se había judicializado “por la cuota alimentaria y por un montón de cosas más que están dentro del matrimonio”.