Conforme avanzan las semanas en Gran Hermano, las sensibilidades se exacerban y potencian y cualquier detalle de la convivencia puede ser una mecha para que los hermanitos exploten. Y, en las últimas horas, le tocó a Emmanuel Vich estallar por una cuestión intrascendente.
Es que en una casa en la que la higiene y el orden es todo un temón, Emmanuel se puso la gorra y se indignó con Bautista, por una extraña costumbre a la hora de lavar y secar su ropa interior, dejándola a la vista de todos, encima del acolchado de su cama.
"Armaste un quilombo acá, un bardo terrible. El niño Nicolás está enojado porque lo acusaste por lo de los vasos", le dijo Lisandro, señalándole a Emma lo pesado que estaba con el asunto del desorden y la vajilla fuera de lugar.
"Había tres de un lado de tu cama y tres del otro", lanzó el cordobés al explicar el drama de los vasos. "¿Por qué te enojás, amigo?", intercedió Rosina. "Claro, ¿por qué te enojás? ¿No podés mejor llevarlos? No nos vamos a bancar este quilombo ahí en la pieza", dijo entonces Emma a Nico.
LA INDIGNACIÓN DE EMMANUEL CON BAUTISTA EN GRAN HERMANO
Queriendo mostrarse colaborativo con la causa del hermanito, Bautista quiso saber si Emmanuel necesitaba que le diera una mano en el dormitorio. "Sí, dale. Me queda guardar los boxers", dijo el peluquero, y Bauti contestó: "Yo los dejé para secar, no deben estar todavía".
"¿Cómo vas a dejar secar boxers arriba de una cama?", estalló entonces Vich, súper indignado. Y el músico se justificó: "Es que les falta un poquito de viento…".