Pese a la intención de Javier Naselli de colocarle un bozal legal, Vicky Xipolitakis publicó este jueves 8 de agosto en sus cuentas de Twitter e Instagram una carta en la que describe con escalofriantes detalles los maltratos a los que fue sometida durante su relación con el empresario.
“Les habla mi corazón”, escribe la modelo a modo de introducción. Luego, se ocupa de desarmar los argumentos esgrimidos por el hombre a quien denunció en la Justicia por agresiones y maltrato.
VICKY XIPOLITAKIS: "FÍSICAMENTE RECIBÍA CACHETADAS A A MANO ABIERTA QUE ME DEJABAN LA PIEL COLORADA POR DISTINTAS PARTES DEL CUERPO, O EMPUJONES POR COSAS QUE PARECÍAN MAL O NO LE GUSTABAN. Y LAS AGRESIONES VERBALES ERAN TODO EL TIEMPO DENIGRÁNDOME COMO MUJER".
"Sinceramente, la agresión física la dejaba pasar, nunca le di importancia, más me dolía la verbal. Siempre le pedí que adelante de Salva no grite, sabía mi punto débil, nunca le importó su hijo y menos yo", explica Vicky, quien tuvo junto a Naselli a Salvador Uriel, un bebé que hoy tiene 8 meses.
Sobre los golpes que recibía del empresario, la joven describe: "Físicamente recibía cachetadas a mano abierta que me dejaban la piel colorada por distintas partes del cuerpo, o empujones por cosas que le parecían mal o no le gustaban. Y las agresiones verbales eran todo el tiempo denigrándome como mujer".
Xipolitakis cuenta que el 24 de julio tomó la decisión de separarse y se lo comunicó a su abogado, Fernando Burlando. En ese momento, Naselli le dijo que no le iba permitir dejar el departamento. "Exploté en llanto y le dije: 'Es la última vez que me faltás el respeto'. Ahí fue cuando me empujó y ahorcó tan fuertemente, que ni cuenta me daba de los golpes. No dudé en hacer la denuncia y ponerle fin a todo esto", relata.
También se refiere al día en que Naselli golpeó a su hijo, Salvador. "Le pedí que lo tenga a upa porque tenía que ir al baño y él lo revoleó a Salvador y rebotó en la cuna. El bebé abrió grandes los ojos y miraba asustado. Hay cosas que no puedo perdonar", confiesa.
Triste por este terrible desenlace, Vicky expresa: "Traté de apostar a una familia que nunca existió, porque yo sí me había enamorado y estaba muy ilusionada en formar una familia feliz. Pensaba que con amor podía mejorarlo, pero juro que no pude. Hice de todo, dejé mi vida para acompañarlo a todos lados. Vivía dándole sorpresas, amor… Mi mayor acto de amor fue darle un hijo. Me arrepiento del padre que le di a mi hijo".
A continuación, la carta completa: