Ha transcurrido mucha agua bajo el puente. Tras diversas crisis, con sacudones que parecían irreparables, Rocío Marengo atraviesa un campo de estabilidad con su pareja Eduardo Fort y luce radiante, absolutamente feliz y con el deseo latente de caminar por el altar.
En el contexto del casamiento de la hija del empresario, la famosa repitió, en diversas entrevistas periodísticas, que ya planea con todo su propia boda. “Si Dios quiere, este año nos toca a nosotros también", expresó con una sonrisa en su rostro y una mirada de enamorada en Intrusos.
Empero, Eduardo intervino con una frase contradictoria al anhelo de su novia y manifestó delante de los micrófonos: “Yo ya probé eso… pero no. Por ahora estamos muy bien conviviendo, por ahora no". Una revelación singular, que activó las alarmas.
En todo este misterio apareció una opinión de la ex esposa de Fort, Karina Antoniali, que charló con Socios del espectáculo y sacó a la luz sus dudas sobre una posible unión legal de Marengo con el millonario. En primera instancia, se refirió a su nulo lazo con Rocío: “Nunca me saludé, nunca nada. Medio como que ella no me banca un poco y tendría que ser al revés me parece”.
LA EX ESPOSA DE EDUARDO FORT DIJO QUE NO CREE QUE ROCÍO MARENGO SE CASE CON EL EMPRESARIO
Además reforzó su pensamiento respecto a no propiciar un acercamiento con la mediática: “Nunca va a haber una cercanía, porque yo estuve 25 años casada con Eduardo, no va a haber, ni lo pretendo, ni lo quiero. Es un ni, no me molesta que esté con él, que estén bárbaro, que estén felices. Pero acercamiento con ella no quiero”.
El cronista apretó las clavijas en el tópico más controversial y le preguntó: “¿Qué te pasa cuando ves que ella tiene muchas ganas de casarse y él le esquiva”. Así, Antoniali exteriorizó una consideración estridente: “Lo dejo a tu criterio. Tengo muchas opiniones, pero no vienen al caso. Si él se quiere casar, que se case, bienvenido sea todo. Si quieren tener hijos, que tengan. Que hagan lo que quieran”.
Hasta que aflojó su postura más políticamente correcta y disparó contra el sueño irrefrenable de Rocío: “No se si van a casar. Pero sobre todo por Las caras de él, ¿viste? Lo conozco bien, aunque cambió mucho él”. Con esa definición infirió que en las respuestas ante cámaras de Eduardo anticipan sus escasos deseos de contraer matrimonio con Marengo.