La casa de Gran Hermano volvió a revolucionarse con el ingreso de nuevos participantes que se sumaron en esta etapa del reality a competir. Quienes ya se encontraban dentro del programa, les dieron una cálida bienvenida.
El hecho de tener personas nuevas con las cuales interactuar, verse y conocer historias, generó mucha emoción en los hermanitos. Y sorprendentemente, Darío Martínez Corti, quien es uno de los flamantes concursantes, tiene una relación estrecha con Virginia.
Ambos mediáticos tienen un pasado en común debido a que son oriundos de La Plata. Apenas puso un pie dentro de las casa, Darío comenzó a hablar de dónde la conoce: “Primero que es muy conocida en La Plata por el tema del stand up”.
Sin embargo, los hermanitos no creyeron mucho en su versión y comenzaron a preguntarse si ellos tuvieron un romance vintage. Para que no se generen falsas especulaciones, aclaró de qué manera nació su vínculo.
“La conozco a través de una amiga que tiene, que nos conocimos. Cuatro o cinco veces la habré visto. De la vida personal de ella no sé nada. Le vendí un auto una vez sin saber que era de ella, después me enteré”, explicó Darío.
CÓMO ES LA RELACIÓN ENTRE DARÍO Y VIRGINIA
Pero eso no es todo debido a que también Virgina fue alumna de la mamá de Martínez, quien durante años fue docente en La Plata. “Ella fue a un colegio del cual mi mamá era maestra”, explicó el hermanito sobre su compañera.
Con una diferencia de edad no muy notoria, 55 y 57 respectivamente, la participante se defendió diciendo que “alucinando cualquiera”. “Nos conocemos de la vida, somos contemporáneos. La mamá de él fue mi maestra”, comentó ella a la pasada.
Y frente a la polémica que se generó entre los televidentes porque dos personas dentro de la casa ya se conocían anteriormente, llevó a que Santiago del Moro haga una fuerte aclaración: “No tiene nada de malo conocerse. En este juego entran hermanos, parejas. En definitiva todos terminan jugando solos porque solo uno va a ganar”.
