Recientemente, Ana Paula Dutil pudo contar con profundidad la grave depresión que se le manifestó hace unos dos años, cuando se vio de regreso en la Argentina luego de toda una vida en Miami, separada de Emanuel Ortega, lejos de dos de sus hijos y sola en una casa con su hija menor, India.
India tenía 16 años cuando le tocó ser testigo de la caída anímica de su mamá y ahora, a sus 18, la modelo y cantante relató cómo fue estar cerca de Ana Paula, intentar ayudarla a salir de su estado, con sus herramientas. En una entrevista con La Nación, India indicó que la vuelta a la Argentina “fue un shock total”.
“A mamá, que es una persona hipersensible, le pegó muy fuerte. Se fue poniendo triste, más triste, muy para adentro”, dijo India. Dutil no quería salir de la cama y dejó de verse linda. “Vivía en pijama, sin ganas de nada. En ese entonces estábamos las dos solas en la casa así que fui testigo de cada escalón descendente”.
“Todo se va agravando y es muy difícil saber qué hacer”, aseguró la nieta de Palito, quien recuerda lo mal que le caían los consejos de los demás. “No le gustaba que le sugirieran cosas, la angustiaba más. De a poco yo me fui dando cuenta por dónde entrarle”, dijo.
INDIA ORTEGA AYUDÓ A ANA PAULA DUTIL A SALIR DE LA DEPRESIÓN
India descubrió cómo ayudar a su mamá: “En vez de decirle que debía hacer tal cosa, le proponía hacerla juntas. ´Dale, te arreglo un poquito y salgamos a caminar´, le decía. Porque si una persona padece depresión todo lo que le digas lo recibe como una orden”.
Ana Paula a veces aceptaba y India recuerda que, cuando lo hacía, “parecía feliz”. “Yo la maquillaba, la peinaba, le elegía qué ponerse, hacía todo sutilmente porque no quería que se enojara. Hacíamos cosas chiquitas, quizás tonterías, pero que le hacían bien”.
Pero esos gestos no alcanzaban para sacar a la modelo de la depresión, quien incluso fue internada, sin buenos resultados. “Fueron dos semanas terribles. Me acuerdo que pasó su cumpleaños ahí, nos rogaba salir y la sacamos”, indicó.
"Sé resolver, es como que me doy cuenta cómo se puede ayudar a sanar. A lo mejor hay algo innato. Fueron ocho meses que me hicieron madurar un montón", aseguró India, quien aconsejó en un caso similar “primero escuchar, tener paciencia, por momentos ser invisible, porque un gesto puede cambiarlo todo”.