Micaela Tinelli atraviesa un panorama complejo, sumamente adverso en lo emocional, una tormenta que debe sortear y que le genera sentimientos encontrados. La dicotomía en la pareja que configuró con Lisandro López se presentó y los confrontó con un desafío profundo.
La hija de Marcelo Tinelli sufre por la carrera de su novio, que tras unos años en México, donde ambos se radicaron y apostaron fuerte a la convivencia, tuvo que mudarse a otro continente, más precisamente a un destino hostil por el choque cultural: Arabia Saudita.
Esta variación en lo profesional obligó a Mica a tomar una decisión y optó por regresar a Argentina y encontrar algunos momentos para escaparse a visitar a su amado. Por eso, la joven armó una publicación llena de sinceridad, en la que relató todos los miedos y los planteos internos, que evidentemente llegaron hasta dudar en continuar con la pareja.
"Siempre fui una persona muy miedosa en general, creo que ya lo conté... el año pasado, cuando a Licha le llegó la propuesta de venir a jugar a Arabia, lloré una semana entera, sin exagerar, porque sabía todo lo que eso implicaría", contó a corazón abierto la hija del conductor del Bailando.
MICA TINELLI ADMITIÓ QUE LLORÓ POR SU NOVIO
En esa carta abierta, Mica agregó: "No poder acompañarlo 100%, mantener una relación a distancia, viajar casi 30 horas para poder vernos, diferentes horarios, rutinas, casi como si fuesen diferentes mundos. Todo un poco (o bastante) complicado para una persona como yo”.
Totalmente envuelta en la honestidad, Tinelli admitió que al distancia se le tornó una carga honda: “Sería una mentirosa si digo que no me cuesta, que muchas veces no me siento sola, que no volví a tener más ansiedad y algunas cosas más. Pero entendí, que las mejores cosas siempre están del otro lado del miedo".
Y para concluir iluminó sus razones para seguir al lado de Licha: "Al miedo hay que enfrentarlo, atravesarlo. Si fuese por mi cabeza, mi mente (que es la más difícil de controlar porque los pensamientos son como martillazos constantes) quizás hoy no estaría acá , pero mi corazón me dice lo contrario y me hace avanzar y seguir. Acá estoy, acá estamos".