Esta joven, fresca y hermosa rubia de ojos claros tiene atributos suficientes para subirse a las pasarelas. Sin embargo, la modelo, actriz y estudiante de periodismo y actuación apunta más allá en cuanto a su carrera artística. “Soy una santafesina que vino sola a vivir a la ciudad de la furia, a los 18 años, con muchas ganas de crecer en esta profesión que elegí de tan chica. Acá crecí como persona y como mujer. Hoy siento que estoy muy bien parada”, arranca contando Caterina Pugin (22).
Y luego amplía: “Arranqué con el modelaje a los 11 años, cuando quedé en un scouting que hizo Pancho Dotto en la ciudad de Santa Fe, en 2009. Ya tenía ganas de instalarme en Buenos Aires, pero la prioridad era terminar el secundario. Si bien el mercado allá era más limitado, trabajaba en campañas y desfiles para marcas chicas, y venía a Buenos Aires para trabajos puntuales… Siempre aposté a la carrera de modelo porque me encanta y me llena de satisfacción, pero la verdad que el día de mañana quiero trabajar en televisión, ya sea de conductora o en la actuación. Me gusta y siento que ese es mi futuro… Hice participaciones en novelas, como Fany la fan, en Telefe; 100 días para enamorarse, un videoclip; estuve en la obra de teatro Chicas de cristal, con producción de Aldo Funes, en el verano hice temporada en la Avenida Corrientes. Me preparo y estudio actuación”.
–¿Sentís que al venir del palo del modelaje un poco se te encasilla o prejuzga?
–Siento que hoy a la modelo no se le da el lugar que se le daba antes. Ahora hay muchas redes sociales, influencers, y no se necesita hacer un evento para mostrar lo que uno sabe hacer.
–¿Fue gracias a esta carrera que llegaste a conocer y cenar con Luis Miguel en un hotel de Puerto Madero?
–Lo conocí, eso es verdad. Cené hace unos meses junto con otras tres modelos más en la bodega del Faena Hotel. Fue una cena donde había gente de él también. Cuando me llegó la invitación, la verdad ni lo dudé. ¿Cuántas veces se puede dar la posibilidad de cenar con Luis Miguel? Cuando salió la noticia se dijo que yo había ido engañada al hotel, pero jamás dije eso. Sabía perfectamente a dónde iba, y él en ningún momento se me insinuó. Y si lo hubiese hecho… ¡conmigo no tenía chances! Fue siempre caballero, seductor, amable. Comimos y hablamos un montón. Luismi se sentó en la cabecera de la mesa, sacó un parlante y puso música para ambientar el lugar. Fue una cena linda en la que hablamos como si fuéramos amigos, y sentí que él quería desenchufarse de tanto trabajo. ¿Si seguimos en contacto? No directo. Conozco gente cercana a él, pero no tengo nada para decirle ni hacerle llegar. Después me invitó a otra cena a la que no me sumé, y al VIP para un show al que no asistí porque tenía que trabajar en un carnaval.
–¿En este momento estás en pareja?
–Estoy bien, feliz, rodeada de gente que me quiere… ¡Soy muy enamoradiza! El día que llegue el amor… ¡estoy más que segura de que llegará!
–Pero se te relaciona sentimentalmente con Matías Alé…
–A Mati le tengo el máximo cariño. La verdad que lo quiero mucho. Es una persona encantadora, divina. Y es increíble lo que la gente lo quiere también. La verdad es que con él nos llevamos genial, compartimos momentos muy lindos. Por ejemplo, para mi cumple estuvo, conoció a mi gente, a mis amistades, a mi familia.
–¿Cómo lo ves a Matías?
–Me parece una persona súper divertida, muy caballero, amable, cariñoso.
–¿Qué te gusta de él?
–Todo. El como hombre, su forma de ser, y compartimos el mismo grupo de amigos, así que compartimos muchas salidas juntos. Es una persona que me encanta.
–¿Están empezando una relación?
–La palabra novios es muy fuerte. Hay que conocerse bien para definir cómo es una relación. Me gusta dejar que todo fluya, no hay nada que apurar. Pero la pasamos muy bien juntos.