Se avecina una gala de eliminación disímil, absolutamente atípica para Gran Hermano, ya que el reality pondrá a consideración del público el familiar que abandonará la casa. Entonces, todos los participantes iniciaron campañas para convencer a los seguidores.
En ese sentido, Darío Martínez Curti también activó su mecanismo de convencimiento para lograr que su hijo Francisco continúe en carrera, que no lo quitan de su lado. Así, se lo vio en el jardín, mientras tomaba un poco de sol, a pesar de las gélidas temperaturas.
Al lado del amigo de Bautista Mascia, también uruguayo, el concursante aprovechó esa presencia para iniciar un proselitismo para favorecer a su heredero y que no caiga en las garras de la eliminación. Darío instó a su hijo a armar una buena estrategia de marketing.
Con los rayos ultravioletas en su rostro, Martínez Curti llamó a Francisco y lo estimuló: “Pancho dale que arranca el aviso publicitario. Estamos con la gente de Uruguay apoyando también”. Así, el amigo de Bautista lo desasnó: “En Uruguay es voto más el nombre, sería en tu caso voto Franciso al 7020”.
DARÍO PIDIÓ AYUDA A URUGUAY EN GRAN HERMANO
Evidentemente con dificultades para retener los datos en su memoria, Darío intentó un aviso y vociferó: “Voto Francisco al 720 para la gente de Uruguay. Vamos Francisco”. Aunque le aclararon que el número era 7020. Inmediatamente después, Martínez Curti nombró una serie interminable de ciudades.
Motivado en implorar por apoyo, por convencer que le donen un sufragio positivo a su adorado hijo, Darío narró: “Después tenemos a la gente de Salto, de Pergamino, después a Arrecifes, a toda La Plata, chicos activen. Después a quién tenemos, a familiares, obvio”.
Para culminar, el participante, que ingresó a la casa en esa oleada de cinco nuevos integrantes hace unos meses, volvió a rogar: “A todos, a la Argentina entera, que este domingo nos queremos quedar. Voten Francisco al 9009. ¿De quién nos estamos olvidando?”.