Levantaron la barrera y permitieron el ingreso masivo de personas externas al reality, para volver a romper el aislamiento y fomentar la dispersión de datos importantes del exterior. Gran Hermano ejecutó otra vez la mecánica de embutir a familiares en la casa.
En esa manada de seres queridos, que se reencontraron con los seis sobrevivientes de la competencia tras meses de separación, se destacó la inmersión en la dinámica del programa de Marisol, la novia de Martín Ku, quien ya demostró un perfil alto con sus múltiples apariciones en la televisión y su actividad intensa en redes sociales, para incluso sacarle rédito económico al éxito de su pareja.
En definitiva, la joven no demoró mucho en entablar una conversación delicada con el Chino, ya que a las pocas horas de su estadía en el show le consultó sobre la casa que se ganó en una prueba compleja. Evidentemente, la morocha deseaba conocer la idea de Martín con ese regalo millonario, que ronda los cuarenta millones de pesos.
Sentados en la galería del jardín, Marisol encaró sin vueltas, ni filtros, al Chino y le preguntó directamente: “¿Qué tenés pensado hacer con la casa?”. Evidentemente, la joven ya había prediseñado varios escenarios porque le manifestó: “Se me ocurrieron dos opciones muy divertidas. Una es ponerla en la costa como casa de verano y hasta la podemos alquilar”.
LA NOVIA DE MARTÍN KU LE HIZO PASAR VERGÜENZA EN GRAN HERMANO
En esa charla, típica de una pareja pero que sonó a un interés desmedido por lo económico, Marisol ejecutó un comportamiento que no pasó desapercibido entre los fanáticos de Gran Hermano. ¿Qué pasó? Muchos usuarios remarcaron que le hizo pasar una vergüenza mayúscula delante de todo un país.
En lugar de ponderar la posibilidad de reencontrarse con su amor, la novia del Chino le recriminó un movimiento natural, absolutamente involuntario, y le reprochó a los gritos: “Tratá de no escupirme”. Así, los internautas la criticaron por su actitud y le llovieron comentarios negativos.
En ese universo digital se amontonaron mensajes como: “Qué pesada, por qué no habla eso después”, “Ella solo piensa en plata”, “Por algo Arturo no la quiere”, “Todo bien con sus proyectos pero hablarlo ahí es muy de materialista, hace 6 meses que no lo ve”, “Me cayó como el ort... es muy caprichosa” y “Ella solita lo va a hundir”.
