Bien es sabido que los ex participantes de Gran Hermano suelen tomar partido por alguno de sus compañeros. Y fue en la última gala de eliminación donde quedó al descubierto que, casi por unanimidad, la mayoría de los que están afuera tenían su candidato favorito.
De esa forma, el martes 18 de junio por la noche en la edición especial de Telefe, y con una tribuna repleta de fanáticos del formato, quedó expuesto que Furia, en este caso, no tenía aguante… al menos de sus pares. Tal es así que solo uno de ellos la saludó.
Pocos minutos después de pasada la medianoche, y luego de que el conductor del programa le comunicara a los participantes que siguen en carrera que quien debía abandonar la casa era Juliana Scaglione, tal como es la rutina, la doble de riesgo arribó al estudio.
Allí la esperaba Santiago del Moro, quien la recibió con un fuerte abrazo, al tiempo que apuró ese momento a fin de concluir la transmisión y guardar la entrevista con la última expulsada para el día siguiente. En ese contexto, y antes de que se la lleven a Furia al hotel esta se acercó a agradecer a sus fanáticos.
FURIA TIENE AGUANTE... Y UNA SOLA COMPAÑERA QUE LA BANCA
Pero lo que la mujer de cabeza rapada no pudo obviar fue el hecho de que todos aquellos que fueron sus compañeros y que logró con sus estrategias ir dejando fuera de competencia llevaban puesta una remera que destacaba la campaña en su contra.
Sin embargo, una de las hermanitas fue la excepción y tuvo el gesto de recibir, saludar y respetar el momento de Scaglione… y fue Zoe Bogach quien se acercó hasta la doble de riesgo para darle un beso. Y si bien ese momento clave no se vio en cámara ya que no estaba más el programa al aire fue alguien del público que captó el reencuentro.
Dicho video se viralizó en las redes sociales y dio fe de que, a pesar de que la producción la custodiaba y trataba de llevársela del canal, ambas mujeres pudieron protagonizar ese breve pero polémico saludo.
