El 19 de junio, Lucía Galán fue dada de alta en el Sanatorio Mater Dei tras someterse a una operación por la que le retiraron una pequeña parte del páncreas. Un quiste “premaligno”, tal como definió la cantante de Pimpinela, que le detectaron al hacerle estudios en España.
Acompañada por su hija Rocío, Lucía está en su casa, recuperándose según los tiempos esperables, evolucionando favorablemente a lo que le indicaron sus médicos. Así lo informó la joven, que vino desde España, donde reside, para estar con su mamá.
“Mamá sigue estable, cumpliendo con su tratamiento sin tiempo establecido”, arrancó Rocío en un posteo publicado en la cuenta de Instagram de la artista, donde desde que se operó fue informando cada nuevo parte a sus fans, colegas y seguidores.
Además, la joven adelantó cómo y dónde será la primera aparición pública de Lucía Galán ante los fans de Pimpinela: “Cuando recupere la fuerza su primera salida será la visita al Hogar Pimpinela para celebrar su 28 aniversario. Gracias a todos”.
EL ÚLTIMO MENSAJE DE LUCÍA GALÁN ANTES DE ENTRAR AL QUIRÓFANO
Momentos antes de operarse, Lucía Galán explicó lo que le pasaba. “Encontraron un quiste premaligno en mi páncreas. Se hizo un seguimiento en todo este tiempo y la conclusión es que tengo que ir a cirugía; tienen que cortar la cola del páncreas, donde tengo el quiste, pegado a la pared y esto es para prevenir el cáncer de páncreas”.
“Esto fue un hallazgo milagroso, que a pesar de todo lo difícil que va a ser atravesar esto, agradezco a Dios que me lo hayan detectado a tiempo. Y también quiero pedir a los médicos que hagan estos controles de abdomen, para prevenir tantos cánceres de páncreas…”, cerró la cantante.
