El amor explotó y los impulsó a aventurarse a ese desafío movilizante, que carece de raciocinio y que se motoriza en una fuerza impredecible e intangible. Nicolás Occhiato y Flor Jazmín Peña identificaron que latía una conexión superadora a la amistad y saltaron al vacío de construir una pareja.
Tras el impacto inicial de la oficialización del noviazgo, los famosos corroboran cotidianamente que nadan en las aguas del sentimiento. Por eso se aguardaban más pasos evolutivos en la relación y ahora se acaban de concretar, dado que admitieron una novedad impresionante.
En el transcurso de la edición del miércoles del ciclo de streaming de Luzu TV, el conductor disolvió el misterio y detalló con total honestidad: “Vamos a dejar de dar vueltas. Este domingo vamos al living de Susana Giménez”. Una invitación inesperada, que se producirá este domingo.
Emocionada por la oportunidad de acceder a un público más masivo, y por toda la simbología de sentarse en ese sillón, Flor confesó: “Me parece una locura”. Y acto seguido recordó: “Yo me acuerdo de que con una bata turquesa, llena de bolitas de plush, ridícula, bailaba todas las mañanas la canción de Susana”.
OCCHIATO Y FLOR JAZMÍN EMOCIONADOS POR IR A LO DE SUSANA GIMÉNEZ
Para dimensionar el peso específico de esa aparición televisiva, Peña añadió: “Le decía a Nico que es algo que jamás pensé que sucedería. Ni siquiera lo llegué a pensar, me parece una locura”. En tanto que Occhiato exteriorizó sus vacilaciones sobre el outfit: “No sé si ir de traje. Seguro vaya con traje y una remera”.
Movilizado por esta entrevista con su novia en lo de Susana, Nicolás reveló: “Ayer, cuando nos invitaron, le decía a Flor que no me la esperaba ni en pedo”. Y también admitió que podría ir con su mascota: “Estoy pensando si llevar a Carlitos”. Ya en un tono más relajado, el conductor bromeó: “Susana se puede mandar varias. Ojalá se confunda a Flor con Flor Vigna, sería bárbaro”.
