Ejecuta ese juego a la perfección, ese que se basa en bajar un manto de incógnita, presuntamente con el objetivo de mantener en vilo la atención de la opinión pública en su figura. Wanda Nara disolvió la trama más enredada de su privacidad: el divorcio.
La mediática se encargó de enviar mensajes confusos respecto a su situación civil, porque desde aquel comunicado en el que confirmó la separación de Mauro Icardi, que publicó hace muchos meses, realizó movimientos muy peculiares, como mostrarse muy compinche con el futbolista en sus visitas a Argentina.
En definitiva, Wanda también ejecutó otras maniobras singulares, como su reciente confirmación de su relación íntima con L-Gante, a través de los posteos que compartió en su Instagram de una noche de diversión con el cantante, en los que se percibe una complicidad extrema, que sobrepasa la amistad.
Ahora, Nara acaba de hablar definitivamente y sin rodeos del trámite legal de fin de su matrimonio con Icardi. Una cronista de Socios del espectáculos le preguntó: “¿Vas a iniciar los trámites de divorcio?”. Lejos de horrorizarse o patear la pelota afuera, Wanda confirmó: “No sé, la verdad que no me quiero ocupar de eso”.
WANDA NARA CONFIRMÓ QUE HAY UN DIVORCIO DE ICARDI EN TRÁMITE
Suelta a ahondar en un aspecto al que le rehuyó en los últimos meses, la famosa agregó su pesar por toda la implicancia del divorcio: “A mí ya me costó muchos años el primero y es como que me quedó un trago amargo”. Aunque valoró la relación que reconstruyó con López: “Hoy tengo muy buena relación con Maxi, pero es feo todo este proceso”.
A partir de la angustia que ya experimentó en ese procedimiento en la justicia para destrozar un matrimonio, Wanda corroboró su postura ante este nuevo escenario de finalización de la pareja con Icardi y afirmó: “Entonces es como que yo no me quiero ocupar”. Evidentemente, la mediática posee personas que trabajan en la firma y acuerdo con Icardi.
"La verdad que no me quiero ocupar del divorcio yo en persona. Es una separación en buenos términos"
Sin nombrarlo específicamente a Mauro, Nara aseveró: “Es una separación en buenos términos con alguien que no pide nada". Y soltó un mensaje entreverado: "Lo importante es que la gente que estuvo o está conmigo sepa cómo soy yo. Después, todo lo que digan es parte de la imaginación, a veces del ambiente o de la gente que no me quiere”.