Jennifer Lopez está en un momento de su vida a donde su mirada, respecto a todo lo que pasó, vivió y hoy se viene por delante, es muy diferente a la de otra etapa. A sus 55 años, y luego de separarse de Ben Affleck, la artista abrió su corazón como nunca.
Haciendo un gran repaso de lo que fue su vida, Lopez decidió focalizarse en lo que fue su rol como mamá de sus hijos. Y en ese sentido, se hizo un profundo replanteo que la llevó a preguntarse si está realmente bien o no la manera en la que actuó.
“He sido madre soltera varias veces a lo largo de mi vida, y me he llegado a preguntar ‘¿Soy suficiente para ellos?’. Lo cierto es que todo lo que realmente se necesita es que un buen padre que te quiera de verdad", destacó Jennifer.
Recordando que la cantante tiene a sus mellizos Max y Emme de 16 años, a quienes tuvo durante su romance con Marc Anthony, ella decidió focalizar al rol de madre y padre por igual, pero destacó la figura de Anthony Robles, un luchador profesional al que le falta una pierna, pero inspiró lo mejor en ella.
LA INESPERADA REVELACIÓN DE JENNIFER LOPEZ
"Se lo escuchas decir al propio Anthony, y mira todo lo que ha sido capaz de lograr. Dice mucho sobre el carácter de alguien lo que pueden llegar a lograr cuando las personas a su alrededor son buenas, cariñosas y se apoyan mutuamente", expuso Lopez, quien siempre buscó rodearse en un contexto de amor y cariño.
Y continuó: "No cambiaría nada de todo lo que mi hijo y yo pasamos, tanto juntos como individualmente, a pesar de que fuera duro, doloroso, de que muchas veces llorara y me preguntara por qué era yo la que tenía que pasar por aquello una y otra vez semana tras semana y año tras año. Sortear todo eso valió la pena para llegar a donde hemos llegado, porque en lugar de rendirnos bajo la presión, él y yo seguimos luchando”.