Durante la gala de los Martín Fierro de Cable, Sol Pérez vivió varios accidentes con su vestido. Uno de los más llamativos que relató la panelista, es que luego de la cuarta tanda del evento, se encontró con que su vestido verde estaba manchado con remolacha porque accidentalmente se habría sentado encima.
Sin embargo, sembró la duda de si el caso habría sido adrede ya que la hortaliza había estado presente únicamente en la entrada, y ya estaban cerca de comer el postre; por lo que no debería haber quedado rastro en su silla ya que, además, ella no consume remolacha. Lejos de tomarlo como algo pasajero, Sol relató el hecho ofendida en Involucrados y Luis Ventura le prometió utilizar las cámaras de seguridad para averiguar el hecho.
“Más allá de todo, sí me pasó algo rarísimo en la mesa, en la entrada sirven como un queso con remolacha… ya habían levantado los platos, sirvieron el principal, habían pasado cuatro tandas ya… en la quinta tanda yo me levanto para ir a hacer una nota, y me dice una de las productoras que estaba conmigo ‘Sol no te muevas porque tenés una remolacha en el asiento y te manchó todo el vestido’” relató Sol Pérez explicando el accidente.
Ante la mirada de sorpresa de sus compañeros de Involucrados por qué fue lo que pasó, la modelo prosiguió: “Un vestido verde lleno de remolacha que parece que me hubiera venido”, haciendo alusión a una posible mancha de menstruación.
¿QUÉ FUE LO QUE PASÓ?
Entre especulaciones y dudas, el Pollo Álvarez, compañero de mesa de la modelo, relató en su programa Nosotros a la mañana la verdad de los hechos y confirmó que fue nada más que un accidente: “Sol Pérez terminó sentada arriba de la remolacha porque, en su nominación, Luis Piñeyro me tiró todo, y se le quedó la remolacha en el sillón... y Sol se sentó encima”.
Por otra parte, otro blooper que sufrió la exchica del clima fue en una entrevista junto a Fabián Medina Flores. La modelo estaba luciendo su vestido y el asesor de moda quiso levantarle el pronunciado tajo para mostrar la caída del atuendo y terminó subiéndolo por demás y dejando a la vista de todo el público la bombacha de la panelista.