Si el bolsillo acompaña el espectro se amplía. Da la posibilidad de elegir, ofrece múltiples alternativas y la verdad es que en el abanico hay para todos los gustos. Cuando los números cierran y el deseo de tomarse un descanso quiere agigantarse ante tanto trajín, nada mejor que disponer de la chance de deshojar la margarita. ¿Mar o montaña? ¿Frío o calor? ¿Hotel o cabañas?
Facundo Arana (47) es bastante versátil como turista. El galán juega en toda la cancha, simplemente porque siempre se declaró un amante incondicional de la naturaleza. Por ende, sus gustos y los de su familia a la hora de armar las valijas no se circunscriben a ninguna condición en particular. Así como en verano es común ver al actor con sus hijos deslizarse en las olas costeras practicando surf, a mitad de año, cuando las temperaturas bajan y la nieve se viste de principal atracción, el GPS lo conduce hacia el sur del país.
Claro, el snowboard también le tira. Y mucho. De hecho, Facundo interrumpió las grabaciones de la novela que viene grabando en Telefe para escaparse a Chapelco, ciudad en la que lo esperaban su mujer, María Susini (43), y sus tres herederos: India (11), Yaco (10) y Moro (10).
En familia
Con las clásicas antiparras y el resto del equipamiento reglamentario, los cinco no dejaron pendiente sin transitar. Afortunadamente para ellos, el clima los acompañó decorando los cerros de blanco, y si bien el tiempo que pasaron juntos fue corto, ya que Facundo retornó a los tres días para retomar sus compromisos laborales, las jornadas compartidas fueron intensas y divertidas. Ya es casi un clásico de la familia Arana esto de trasladarse a la Patagonia para meter un break invernal y recargar las pilas de cara al segundo semestre (qué recuerdos trae esa expresión, ¿no?).
Sin dudas, el objetivo es ir detrás de la unión y del fortalecimiento del vínculo familiar, pero por sobre todas las cosas lo que prima es el propósito del esparcimiento. Tal vez no tanto para los más chicos del hogar ni para Susini, quien alterna su rol de mamá con algunas campañas publicitarias en su carácter de modelo.
Disfrutar
Pero sí para Facundo, que aparte de protagonizar Pequeña Victoria (acaba de salir al aire por el canal de las tres pelotitas para disputarle el rating a Argentina, tierra de amor y venganza), se encuentra muy compenetrado con la obra Cartas de amor, el espectáculo que encabeza con Soledad Silveyra. Dos compromisos profesionales que requieren de una dedicación literalmente full time, ya que las grabaciones empiezan cerca del mediodía y los ensayos se desarrollan en horario vespertino.
Por esta razón, el galán no duda cada vez que se le genera un espacio en la agenda: prepara el equipaje y se aleja de Buenos Aires. En esta oportunidad fue Chapelco, pero cuando hay tiempo y lo económico no es un obstáculo, el destino pasa a ser lo de menos. La meta del galán y de los suyos apunta a disfrutar de unas vacaciones en familia. Y eso, obviamente, no hay plata que lo pague.