Alguien debería contar, de una buena vez, la historia de “la otra Sabatini”. Porque todo el mundo habla de una sola: que Oriana esto, que Oriana lo otro, que Oriana acá, que Oriana allá.. ¿Y de Tiziana Sabatini? ¿Por qué nunca se dice nada? ¿Por qué nadie habla de ella, si es tan hija de Cathy Fulop y de Ova como Ori? Aunque sin salirse de la regla, pues también su discurso estuvo vinculado a su hija más famosa, la que hizo “un poco de justicia” fue su madre, Catherine Fulop, quien contó que sus dos nenas están embarcadas en relaciones sólidas y muy importantes.
“Tanto Paulo como Lucas, el novio de Tiziana, tienen muchas cosas de Ova. La dos están embarcadas en relaciones muy importantes. Súper importantes. Los veo a los dos tan delicados y caballerosos que me siento muy tranquila. Lo único que no le perdono a Paulo es que se llevó a Oriana a Europa. Le digo que lo odio y él me contesta que la está cuidando. Hace poco cumplieron un añito, y en un principio, sinceramente, me quería matar. En un momento no la vi por casi cuatro meses, y se me hizo largo. Fue una etapa fuerte, que encima combina con cambios y revoluciones hormonales, y hay que estar preparados para despedir cosas viejas y recibir nuevas”, afirmó.
Tiziana está de novia con Lucas Agustín Mattei, con quien blanqueó la relación en… un recital de Oriana. Es de perfil muchísimo más bajo que Oriana, quien volvió a sacudir al medio cuando en un reciente clip le comió la boca a Emilia Mernes.
En una entrevista que le brindó a Catalina Dlugi para el programa radial Agarrate Catalina (sábados de 12 a 14, por AM 1110), la venezolana consideró que “me encantó ver a Oriana besarse con otra mujer. Me pareció precioso. No me impresionó para nada. Me gusta que sea libre y sienta que pueda hacer cualquier cosa. Lo único que dije fue qué bellas que son las dos, guauuu… Hoy, las nuevas generaciones vienen con la cabeza recargada y no se cierran a ninguna posibilidad de nada. Son amplios y me parece bien. Yo misma me podría enamorar de una mujer. Incluso, si no hubiese estado tan definida con el género femenino, estoy segura de que hubiera tenido una relación con una mujer”.
En ese mismo sentido, reconoció que “de la mujer me gusta esa sensibilidad que le falta al hombre, ese toque más delicado. Creo que por eso duramos tanto con Ova: él tiene su costado femenino bien definido y desarrollado. El mira una película y llora, por ejemplo. Me habían tocado hombres machistas, pero Ova fue distinto. Si me veía llorar no lo aguantaba. Yo lo olí, lo vi y dije ‘este es el hombre que le había pedido al universo’”.
Hace poco, Fulop fue noticia mundial por una declaración que cayó muy mal en la comunidad judía. Y aunque considera haber superado el incidente, recordó: “Yo tenía hasta ataques de pánico. No quería ni salir a la calle. También me di cuenta de que las redes sociales no son la vida. Y comprobé que lo que se dice en Internet no es lo mismo que se ve en la calle, donde la gente me seguía saludando como siempre. Pero yo estaba mal. Y una amiga me dijo que tenía que sanarlo y me puso en contacto con un rabino, Uriel. Lo volví loco, le conté todo, y él fue tan sabio con sus palabras. El me contó un cuento hermoso y me dijo: ‘Vos no vas a poder pedir perdón a todas las personas a las que ofendiste, pero tenés que pedir perdón tres veces para que Dios te perdone’. Eso me calmó un poco. Y sigo pidiendo disculpas para que me escuche la mayor cantidad de gente posible”.
