Ni la separación ni los rumores de romance con la periodista deportiva Alina Moine hicieron que Geraldine La Rosa (42), la esposa del Director Técnico de River Plate, Marcelo Gallardo (43), tuviera una actitud hostil con el exdeportista. Sino más bien todo lo contrario.
A pesar de la separación y de los fuertes rumores, ella se muestra siempre bien predispuesta y con intención de mantenerse cerca del padre de sus hijos, Nahuel (21), Matías (15), Santino (12) y Benjamín Keanu (3 meses).
Así lo demostró el miércoles, cuando llevó a su bebé, nacido en el mes de julio cuando ellos ya se habían separado, al Estadio Monumental para ver el partido en que se midieron River vs. Boca.
Geraldine vio el partido desde un palco y se tomó una fotografía con el bebé en brazos y sosteniendo una camiseta de Nahuel, el mayor de sus hijos que forma parte del plantel Millonario. En la foto, que compartió en su cuenta de Instagram, la rubia escribió un pedido para el Muñeco. “Yo quiero mi primera copa. Vamos pa”, rezaba el cartel que escribió sobre la foto.
El mensaje remite inmediatamente a las últimas hazañas logradas por el talentoso DT cuando venció al equipo xeneize en la final de la Copa Libertadores, en diciembre del año pasado, y cuando logró alzarse frente a Athletico Paranaense de Brasil en la Recopa Sudamericana, en el mes de mayo. Ahora Geraldine le pide a su ex, en nombre de su hijo más pequeño, una nueva victoria que sea la primera que el niño presencie.
De este modo, la rubia dejó en claro que –aunque está separada de Gallardo- mantiene con él un vínculo estrecho y amoroso quizás en honor a los más de veinte años que compartieron como pareja.
