“No tengo suerte con los hombres, prefiero estar sola”, palabras más, palabras menos, era la frase que habitualmente usaba Sol Pérez (26) cada vez que le preguntaban por el corazón. En toda entrevista sus frases referidas al amor iban cargadas de melancolía y hasta con un dejo de tristeza. Cada vez que intentó ponerse de novia moría en el intento en el instante preciso en que llegaba el momento de ponerle un marco formal a la cuestión.
Curiosamente, esto le pasó en reiteradas ocasiones con futbolistas. Estuvo en los brazos de Lisandro Magallán, en la época en la que el defensor jugaba en Boca. La rubia se enteró de que el chico contaba cuestiones íntimas en el vestuario y lo dejó. Cambió de vereda y probó suerte con uno de River, Exequiel Palacios, pero también se llevó una decepción. También lo tuvo que dejar cuando confirmó que el volante mantenía una relación paralela. “La tercera es la vencida”, dijo cuando conoció al delantero Lautaro Martínez, hoy figura del Inter de Italia de novio con otra belleza.
Con el Toro tampoco logró llenar el área de ese sentimiento llamado amor. Una de las diosas del país, tal vez una de las mujeres más deseadas, besó la lona en más de una oportunidad por culpa de Cupido. Enfocada en su trabajo, en el entrenamiento físico, dejó de buscar y se entregó a que el destino la sorprendiera. Justamente en el lugar en el que les da forma a sus curvas fue donde se cruzó con su media naranja, con la persona que le endurece los músculos y le ablanda el corazón. Su nombre es Guido Mazzoni (37), es abogado y empresario.
Pasión por los fierros...
El joven es dueño de un gimnasio de CrossFit, y allí conoció a Sol hace cuatro años. Rutina tras rutina se fueron enamorando y teniendo otro trato que el de profesor y alumna. A Guido le gusta lucir abdominales de acero y un cuerpo tallado. Es una especie de “Sol Pérez, pero en versión masculina”, como le dicen sus amigos para cargarlo. Los allegados dicen que son tal para cual, que fue amor a primera vista, pero que llevó tiempo, justamente, por la desconfianza de ella en los hombres.
“Hace cuatro años que la vengo remando con Sol. Yo la veía diciendo el pronóstico del tiempo y pensaba: ‘Esta chica va a explotar en cualquier momento’. Estaría bueno entrenarla. Le empecé a escribir, pero me contestaba hasta ahí. Cuando entró al Bailando pensé: ‘La perdí’. Creo que es amor. Estoy enamorado mal”, detalló el musculoso y nuevo galán del espectáculo.
En su gimnasio, además de la rubia, también entrenan Cinthia Fernández, Ivana Nadal, Mariano Martínez, Pico Mónaco, Nacho Viale, Candela Ruggeri, entre otros famosos. Incluso, hasta el actor mexicano y estrella de Hollywood Danny Trejo entrenó bajo sus órdenes cuando vino a Argentina a filmar una película.
Justamente ellos lo definen como una persona tranquila, cálida, de la que rápidamente te hacés amigo por su forma de ser. Luego de las primeras fotos, la pareja ya se muestra públicamente. El lunes 28 fueron a la presentación de Crímenes imposibles, la película de Fede Bal. Allí, entre beso y beso, se demostraron el cariño que se tienen.