En el mes de agosto del 2001, después del boom de la primera edición de Gran Hermano, Solita Silveyra le dio ingreso a la casa más famosa del país a 12 personas en busca de fama, popularidad y dinero. Marcelo Corazza había sido el ganador del primer reality grande de la Argentina y muchos fueron detrás de él.
En esa edición ingresaron al programa de Telefé varios que siguieron en los medios como Silvina Luna (fue subcampeona), Pablo Heredia, Gustavo Conti, Ximena Capristo y Alejandra Martínez, entre otros. El ganador, se sabe fue el bonaerense Roberto Parra, quien hoy a los 48 años hace un repaso de sus días en GH.
“A Gran Hermano entré por dos razones: estaba pasando un momento especial en mi vida, no estaba bien anímicamente por una situación personal mía que nunca conté y era un desafío para mi aislarme. Pero la causa principal fue que mi viejo se quedó sin laburo un año antes. Yo le dejé un reparto de madera que tenía y dije: ‘voy a probar suerte’. Yo no tenía los dotes de cantar, no puedo ni hacerlo debajo de la ducha, pero me gustaba mucho el periodismo deportivo”, recuerda El Negro, que estuvo 120 días en la casa.
“Fue una experiencia increíble. Temí irme en la primera semana, pero me fui aclimatando al lugar. Era encierro de verdad, teníamos 40 minutos de agua caliente, no teníamos gimnasio ni lavarropas. Los chicos después tuvieron otros lujos. Jamás pensé que iba a ganar, jamás", afirma.
"EL DESTINO HIZO QUE LA GENTE CON LA QUE TENIA MALA ONDA SE FUERA DEL JUEGO. A MIS AMIGOS LE HABIA PEDIDO QUE ME VOTEN EN LAS PRIMERAS SEMANAS POR TELEFONO PORQUE PENSE QUE ME IBA RAPIDO", AFIRMA ROBERTO.
"A mis amigos los jodía porque sabía que iba a quedar nominado la primera vez y les pedía que me voten para que no me vaya. El destino hizo que la gente y el juego se vaya dando de esa manera y yo vaya quedando. Pegué muy buena afinidad con la mayoría de las personas en el juego y los que no teníamos onda se fueron yendo”, se sincera, quien vivió un momento de violencia en los primeros días en la casa. ¡Dale play!
“Entonces cuando llegó la hora de la final, de que la gente tenga la decisión de quien ganara, me votaron a mí. Creo que gané siendo yo mismo. Pero tuve una desgracia: a mi me pasó lo mismo que a Diego Plotino, que ganó El Bar 2: nos agarró el corralito de Cavallo, la devaluación y todo”, dice el borde las lágrimas.
"AL GANADOR DEL EL BAR 2, DIEGO PLOTINO, Y A MI NOS PASO LO MISMO. NOS AGARRO EL CORRALITO DE CAVALLO, LA DEVALUACION, TODO. Y NOS QUEDAMOS CON UN CUARTO DE LO QUE IBAMOS A COBRAR", DICE PARRA.
“Gané 200 mil pesos/dólares y yo cobraba a los dos meses. Pero con De la Rúa se fue todo al tacho. La devaluación me mató. Nos fuimos a hacer un programa a Mar del Plata en el verano para Telefé y cuando volví terminé cobrando menos de 50 mil dólares. Me costó sacarla del corralito. A Solita Silveyra y a Marcelo Corazza les pasó lo mismo, toda la plata les quedó adentro del banco por confiar. Fue un horror”, sigue el muchacho que vive en la zona de San Fernando, en el norte del Gran Buenos Aires.
DE NOVIAS Y SUEÑOS
“Hoy estoy soltero, sin hijos. Vivo con mi perra. Trabajo fabricando ropa de trabajo, nada que ver con la tele, que me hubiese gustado. Cuando pasó lo de GH empecé a hacer boliches y esas cosas y el estudio fue… Hice algo de periodismo en el estudio, pero laburé con mi viejo y se terminó todo ahí”, explica sobre su no continuidad en los medios el fanático de Independiente y Ricardo Bochini.
Y al hablar de sus sueños, Parra quiere seguir poniéndole empeño: “Mi anhelo hoy es más difícil. Yo fui a estudiar teatro, pero no se dio. Sería lindo incursionar y seguir en el medio, como lo hizo Gustavo Conti. El estudio teatro y laburó bien. Hoy no está tanto en los medios, pero trabaja. A mi me gustan los medios porque siempre me tiraron buena onda. Me reconocieron. Podría haber hecho una buena carrera desde GH, pero bueh… Hay cosas que uno no maneja. Hoy la idea es armar una productora para representar a varios artistas que conozco para ver si se puede dar otra chance. Me encantaría la tele, estudié periodismo deportivo y dejé para trabajar con mi viejo”.
Roberto tuvo algunas historias con sus compañeras del ciclo de Gran Hermano, pero de ellos no quiere hablar. “¿Para qué? Todos hicimos una vida después y no quiero joder a nadie. ¿Novias del medio? No, sólo salí un tiempo con Angie, la chica que era secretaria de Tinelli. Una hermosa y muy buena chica. Salimos en Paparazzi y todo… Hace un tiempo comimos con Silvina Luna y la Negra Capristo y nos sacamos fotos. Tenemos buena onda y un grupo de whatsapp de Gran Hermano. Por suerte seguimos teniendo buena onda”, cierra.