Marley se exhibe genuino, de su transparencia delante de cámaras hizo un estilo único, que le permite liderar la pantalla de Telefé con cuánto formato le asignen. Su risa espontánea, su capacidad de mofarse de sí mismo, su alegría, son algunos de las virtudes que enamoraron al público. Pero en lo referido a su vida privada, siempre le ha puesto un candado.
Desde la llegada de Mirko a su mundo, todo ha cambiado para Alejandro Wiebe, que no puede ocultar la felicidad de ser padre. Se babea por su pequeño, a quien sí muestra en todos los ámbitos, principalmente en las redes sociales. Una visibilidad de su entorno privado importante, hasta veces excesiva. Diametralmente opuesto a sus sentimientos amorosos.
En el comienzo de la cuarentena se especuló que Marley estaba acompañado, por un arquitecto español Nicolás Mart, a quien le permitió subir fotos en su Instagram con Mirko en alguna oportunidad. Pero nunca se terminó de confirmar si ambos pasaban juntos el aislamiento social obligatorio. Aunque, hay imágenes del ibérico con el perro de Marley, que incitarían a pensar que conviven bajo el mismo techo.
ME GUSTARÍA ESTAR ENAMORADO, ENAMORADO.
El conductor de El muro infernal aportó pruebas que van en sentido contrario. A través de un vivo con la Revista Caras, Marley aclaró que no está enamorado, lo cual invita a deducir que en su hogar solo comparte sus días con el hermoso Mirko.
Ante la consulta de “¿estás enamorado?”, el carismático hombre de la TV respondió: “Más allá de Mirko, no. Me gustaría estar enamorado, enamorado. Tengo historias que son así de amor, pero no es un amor que dio ‘estoy enamorado’”.