Jésica Cirio se destaca en distintas actividades menos en una: la cocina. Experta en zumba, disciplina con la que supo recorrer distintos países; también es conductora de Morfi, junto a Gerardo Rozín; y una dedicada mamá de Chloe.
Pero, puertas adentro de su casa, donde realmente falla es en la cocina. Y, aunque en la tercera etapa de la cuarentena, intentó amigarse con las preparaciones, el esfuerzo parece haber sido en vano. Y es en la cocina y en su programa donde se manda blooper tras blooper.
Esta vez, entre otras recetas fitt para mantener su línea de alimentos saludables, la rubia probó hacer un budín que no le salió nada bien. Por el contrario, el resultado fue una preparación apelmazada, según contó en el Precio Justo, el programa de Lizy Tagliani.
Y Martin Insaurralde, su esposo e intendente de Lomas de Zamora, le pidió que no insista más con el arte culinario, que mejor lo deje en sus manos que sabe y le gusta cocinar. "Ya es hora que la cortes. Es una perdida de tiempo. No te sale", bromeó.
Resignada, así como entró a la cocina, Cirio dio por terminado su acercamiento al mundo de las recetas. Pese a que trabaja en un programa de cocina, no hay forma en que Jesica se amigue con las elaboraciones. ¡Al que no le gusta, no le gusta!