A días de su escandalosa separación de Facundo Ambrosioni en medio de acusaciones de infidelidad, Morena Rial logró superar la dolorosa ruptura y se animó a apostar otra vez al amor.
Tras realizar un vivo en Instagram con Bryan Bentaberry, un futbolista uruguayo del club Cerro de Montevideo, se hizo fuerte el rumor de que ambos mantenían largas charlas hasta altas horas de la noche y que estarían comenzando una relación a distancia hasta tanto se disponga el fin de la cuarentena.
El detalle que dejó en evidencia a Morena surgió durante un vivo de Instagram que hizo con su hermana Rocío en el que aclara el motivo por el cual dejó a su hijo, Benicio Franceso, a cuidado de su padre, Jorge Rial.
Durante la explicación Morena repitió en dos oportunidades "tá", una típica muletilla de los uruguayos, similar al "che" de los porteños. “A mi nene no le pasó nada chicos. Yo tuve un problemita y bue, tá, se tuvo que ir con mi papá", explicó. Y al darse cuenta de que se le había pegado esa palabra reconoció: "El tá es matador".
Morena es muy permeable a adquirir los acentos y muletillas de las personas con las que se relaciona. De hecho, durante el romance con Facundo Ambrosioni, a la joven se le pegó el acento cordobés de él. Entonces, la adquisición de la muletilla "tá" fue interpretaa por sus seguidores como una confirmación de su vínculo amoroso con Bryan.
De hecho, durante una reciente conversación con el futbolista, aparece esa palabra. “Ibas a mirar una película, ¿no?", le pregunta ella. Y Bryan le responde: “Y bueno, tá, me cayó un amigo, ¿qué querés que haga?". ¡Tá, tá, ta, amooooor!