Agustín Drubi es un joven que vivió en Argentina hasta los 14 años. Hoy, luego de convertirse en un exitoso empresario, decidió apostar por el país y regresar para invertir en él. Su familia decidió irse a USA para que tanto él como sus hermanos estudien allá, donde empezó su carrera diseñando websites y haciendo marketing para otras empresas, después de eso fue a la universidad y se volvió ortodoncista, llegó a crear la cadena de clínicas de ortodoncia privada más grande de Miami.
Como todo emprendedor siguió apostando a su crecimiento y creó “Drubi Capital”, una empresa dedicada a identificar oportunidades adquiriendo otras empresas privadas como inversión. Una vez tomado el control de las mismas, las asesoran en diversas áreas, pero sobre todo en marketing, buscando generar avances y en definitiva un crecimiento exponencial de cada empresa que suman.
En la actualidad, el porfolio de compañías incluye una cadena de clínicas de ortodoncia y una cadena de clínicas dentales, una agencia de marketing y otra de asesoramiento para clínicas. Además, cuenta con diversas propiedades para desarrollarse a futuro en el negocio inmobiliario.
Siguiendo esta línea diversificada de hacer negocios y atento a los tiempos que corren, Agustín está incursionando en el mundo de las Start Ups como financista de tecnologías que todavía no han salido al mercado. “Nuestra meta es seguir adquiriendo empresas privadas y hacer crecer nuestro porfolio con el tiempo, algo parecido a lo que ha hecho “Warren Buffett” a través del tiempo”, comentó Drubi.
“Volví a Argentina de vacaciones hace un año y decidí quedarme. Desde que me fui tuve la duda de cómo sería volver a vivir acá, donde tengo a mi familia y amigos, volver a vivir donde la paso realmente muy bien, con mis seres queridos cerca. Todavía viajo mucho, pero me gusta cuando estoy en mi país. En el exterior todas las empresas tienen su equipo de management y están en manos de personas más que calificadas, lo que me permite tener el tiempo para pensar en nuevos desafíos”, agregó Agustín.
“En Argentina estoy viendo las posibilidades que hay, noto sobre todo en el mundo de las nuevas tecnologías, que existen muchos avances en el mundo que no se han implementado. Me gustaría desarrollar alguna start up propia y/o de alguna manera ayudar a que ese sector avance, ya sea con inversiones o asesoramiento”, cerró Dubri.
Una vida de lujos y extravagancias
El joven argentino no solo trajo a Argentina su modelo de negocios, también exporto su estilo de vida. Drubi posee una colección de autos deportivos que incluye una Ferrari, un Lamborghini y un Rolls-Royce. Además, disfruta de escapadas en lujosos yates y se mueve en jets privados para viajar por todo el mundo.
Ahora, el joven trae todas sus extravagancias al país, donde empieza a llamar la atención y curiosidad de muchos, llevándolo a estar presente cada día más en el ojo público. Otro punto importante que el argentino exporto fue sus fiestas, en la cual en una de sus últimas veladas estuvo presente el reconocido DJ Fer Palacio, haciéndose cargo de las bandejas en uno de sus eventos.
Su vida excéntrica, sus negocios y los distintos eventos que organiza, están reflejadas en sus redes sociales, en las cuales se puede ver todo lo que va haciendo el joven empresario en su día a día.